Nación
Atención: en zona donde delinque el ELN un soldado del Ejército fue atacado por un francotirador, su estado de salud es critico
Fuentes militares confirmaron que el atentado se dio en vías del municipio de Fortul. En la región delinque la estructura Domingo Lain Sáenz.
Nuevamente la fuerza pública es objeto de un ataque por parte de grupos criminales en el departamento de Arauca. Fuentes de la fuerza pública confirmaron que se encuentra en delicado estado de salud un soldado que fue objeto de un ataque a bala por parte de un francotirador.
En la región donde se presentó el hecho, Fortul, delinque la guerrilla del ELN, específicamente la estructura Domingo Lain Sáenz.
Fuertes operativos militares se están ejecutando en el departamento de Arauca, en donde en las últimas horas se han presentado dos ataques contra la fuerza pública. El primero ocurrió contra el Cantón Militar San Jorge, donde terroristas lanzaron explosivos contra la unidad militar causando heridas a un mayor del Ejército.
Ahora la nueva acción criminal fue contra el soldado que se encontraba prestando seguridad en el departamento de Arauca, entre Saravena y Fortul.
En la noche anterior, martes 13 de marzo, se conocieron algunas fotografías del ataque con explosivos que dejó varios daños materiales, obligando a los comandantes de la Octava División a redoblar las acciones para ubicar a los responsables de la acción criminal.
Es de recordar que Arauca es una de las regiones fuertes de la guerrilla del ELN, pues fue en este mismo departamento donde se presentó el secuestro del sargento Libey Danilo Bravo, orgánico del Batallón Especial Energético y Vial Número 1.
El ELN indicó antes de que fuera liberado el suboficial que “está recibiendo el trato que corresponde, dentro del marco de los derechos humanos y de acuerdo con las realidades de la guerra que actualmente se viven en el departamento de Arauca”.
La acción criminal incluso fue rechazada por el presidente Gustavo Petro, quien dijo que, “estos son hechos que sabotean cualquier posibilidad de paz. Estos hechos de violencia contra la fuerza pública y los que día a día las comunidades no pueden tener cabida en nuestra sociedad”.
Diálogos con el ELN
Hay que mencionar que recientemente se terminó un nuevo ciclo de negociaciones entre la guerrilla del ELN y el Gobierno. El pasado viernes 10 de marzo terminó dicho ciclo y las delegaciones lograron el primer acuerdo que resultará fundamental para el avance de la mesa de diálogos: la agenda con la que negociarán de ahora en adelante.
Se trata de la hoja de ruta con la que las partes iniciarán las conversaciones con temas específicos y con la expectativa de avanzar rápidamente. Aunque la base del texto es el mismo que se construyó con el Gobierno Santos, dicha agenda se actualizó a la coyuntura del país y a las realidades territoriales que existen en 2023. Dentro de las conclusiones se indicó que al ELN se reconocía el estatus político por parte del gobierno.
Además se conoció que el gobierno Petro le aceptó al ELN “examinar” modelo político y económico de Colombia. Aunque seguramente la delegación del Gobierno Petro explicará ese punto, la polémica se da porque eso significa que un grupo armado podrá opinar, plantear propuestas y criticar el modelo económico y político del Estado colombiano.
Dicha posibilidad quedó plasmada en el segundo punto de la agenda de diálogo que se llama Democracia para la Paz, que tiene como objetivo adelantar un diálogo entre los diversos actores sociales convocados, identificar y examinar los principales problemas que son causa del conflicto político, social, ambiental y armado, que permita formular soluciones integrales.
Dentro de ese segundo punto también se incluyeron los siguientes temas. Este punto de la agenda conduce a:
- Revisar y fomentar la participación y las decisiones de la sociedad en los problemas que la afectan, y que puedan materializarse en instrumentos de política pública eficaces en los territorios urbanos y rurales.
- Examinar, desde una perspectiva democrática, el régimen político y el modelo económico.
- Evaluar el tratamiento que se le da a los conflictos políticos, sociales y ambientales en función de la construcción de la paz, entre otros.