Judicial
Atención | Envían a la cárcel a los dos hermanos implicados en el crimen del fiscal paraguayo, Marcelo Pecci
Emilio y Andrés Felipe Pérez Hoyos aceptaron su participación en la planeación del crimen ejecutado en la isla de Barú, por el cual ya hay varios capturados que también confesaron. Las pista ahora está puesta en los autores intelectuales.
Teniendo en cuenta su peligrosidad y el gran riesgo de fuga, un juez de control de garantías ordenó enviar a la cárcel a los hermanos Emilio y Andrés Felipe Pérez Hoyos, implicados en el plan para asesinar al fiscal antifamia paraguayo Marcelo Pecci, registrado el 10 de mayo de 2022 mientras estaba en su luna de miel en la isla de Barú, muy cerca de Cartagena.
En su determinación, el juez doce de control de garantías de Cartagena determinó que los dos hermanos no podrán estar en estaciones de policía ni en lugares transitorios sino que se debe adelantar todo el trámite para que sean enviados a una cárcel de máxima seguridad, entre las que se encuentran La Modelo y Picota (Bogotá y la Tramacúa (Valledupar).
En la audiencia celebrada el domingo los procesados aceptaron su responsabilidad en los delitos imputados y pidieron perdón a los familiares del fiscal paraguayo: “Yo sé que fue un error muy grande y no tengo palabras para expresar disculpas a la familia Pecci, y más a su señora en su estado de embarazo. Estoy muy arrepentido y les quiero ofrecer disculpas de todo corazón”.
El fiscal del caso, Mario Burgos, manifestó que los hermanos Pérez Hoyos puso sobre la mesa 1.500 millones de pesos para la ejecución del crimen. A esto se le sumaron 100 millones de pesos para los viáticos de los sicarios y otros 30 para la búsqueda de gente que estuviera dispuesta a hacer los seguimientos y recopilar información para atentar contra el fiscal antimafia.
Las pruebas documentales y testimoniales permitieron evidenciar que tuvieron conocimiento directo de los seguimientos que le hacían a Pecci y a su esposa primero en Cartagena y luego en Barú. “La compañera sentimental del señor Andrés Pérez, Margareth Chacón y Ramón Pérez se habrían transportado en una camioneta Toyota de color gris placas IWV 738 y reunido en un restaurante con el único fin de planear y proveer al articulador de todos los insumos criminales para acabar con la vida del señor Marcelo Pecci”. Esta mujer, según se reveló, esta mujer estaría en El Salvador.
Uno de los testigos citados por el fiscal indicó que “la vuelta tenía que hacerse rápido, los planes vacacionales duran de 4 a 6 días. Todo era coordinado basados en las publicaciones que realizaba la esposa de Pecci en sus redes sociales”. Después de ejecutado el crimen huyeron a Cartagena en la misma camioneta Toyota con destino a Santa Marta, alojándose en el sector de El Rodadero y posteriormente con rumbo a la ciudad de Medellín.
En la capital de Antioquia se presentaron intercambios de llamadas y mensajes para cuadrar la entrega del dinero que tenían pendiente, finiquitar las recomendaciones para no dejar huellas y la macabra felicitación por el trabajo logrado.
Con esto, en los próximos días se fijará la fecha de la audiencia en la cual se emitirá la respectiva lectura del fallo condenatorio. El fallo tendrá una rebaja de la pena puesto que los dos procesados aceptaron en la imputación de cargos.
Por estos hechos ya fueron condenados a 23 años y ocho meses de prisión el ciudadano venezolano Wendre Still Scott Carrillo, quien -según las pruebas.- disparó contra el fiscal paraguayo; Eiverson Adrián Arrieta Zabaleta, responsable del transporte y la logística; y Marisol Londoño Bedoya y su hijo Cristian Camilo Monsalve Londoño, involucrados en los seguimientos.
Los cuatro procesados firmaron un preacuerdo en el que aceptaron su participación en los delitos de homicidio agravado, y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego agravado. Tras esto pidieron perdón a los familiares de la víctima, su esposa y a la ciudadanía en general.