Fiscalía pidió dejar en firme proceso contra Nicolás Petro, calificó la solicitud de nulidad como “temeraria y superflua”

El fiscal Mario Burgos le solicitó al juez segundo especializado de Barranquilla que no acepte la solicitud de nulidad presentada por la defensa de Nicolás Petro Burgos en el proceso que se le adelanta por lavado de activos y enriquecimiento ilícito.

Para el delegado del ente investigador, la solicitud presentada en la mañana de este jueves “es temeraria y superflua”, puesto que se está incurriendo en un abuso del derecho y la ley. “Se pide una nulidad del acto en el que se avaló la imputación a Nicolás Petro Burgos, quien entendió la formulación y comunicación, tanto que decidió aceptarlos, su señoría, los aceptó de manera libre y voluntaria frente a todo el país, con el compromiso de colaborar con la administración de justicia”.

Consideró que es muy raro que ahora, cinco meses después, salga a decir que se sintió presionado durante la audiencia que se celebró a comienzos del mes de agosto. “Entonces ahora no entiende los hechos jurídicamente relevantes, es presionado, entre comillas, como él lo dijo, cuando estaba en presencia de la bancada defensiva”.

Con este tipo de solicitudes lo único que se busca es afectar el normal desarrollo de la acusación puesto que primero es una nulidad, pero existe una gran posibilidad que se presente próximamente una recusación.

“Esto tiene una razón, que no se acuse formalmente a Nicolás Fernando Petro Burgos, eso es lo que está buscando la bancada defensiva, no es otra, su señoría”, manifestó, visiblemente molesto, el fiscal Mario Burgos.

Para Burgos, existe evidencia suficiente que demuestra que los hechos materia de investigación se presentaron cuando Petro Burgos era diputado por el Atlántico, es decir, era funcionario. “Ahora es que también lo presionamos para que fuera diputado, por Dios”.

En respuesta a la petición de nulidad, el fiscal citó sentencias de la Corte Suprema de Justicia que indican claramente que no se puede abusar del derecho con la presentación de recursos y peticiones que son “inconducentes”, como en este hecho. Citando que en el primer intento de acusación se pidió que el expediente pasara de Barranquilla a Bogotá porque los hechos imputados ocurrieron en la capital de la República.

Frente a esto, la Corte Suprema rechazó la petición e hizo un fuerte llamado de atención frente a este tipo de solicitudes.

A Petro Burgos se le señala nada más y nada menos que de incrementar su patrimonio de manera injustificada en casi 1.053 millones de pesos en 2022, año en el cual, además, lideraba la campaña presidencial de su padre en la costa Caribe.

Habría recibido entre 400 y 500 millones de pesos de Santander Lopesierra, el Hombre Marlboro, un recordado narcotraficante que lideró durante años el contrabando de cigarrillos en La Guajira, hechos por los que pagó una condena de 20 años en los Estados Unidos.

El dinero no llegó a la campaña Petro, fue utilizado para darse una vida de lujos sin control: apartamentos, viviendas, ropa de marca, entre muchos otros, por lo que incluso recibió el reproche de su propia madre que no dudó en catalogar su estilo de vida como el de “un traqueto”.

Y es que con el dinero la entonces feliz pareja se compró el lote para la construcción de la casa de sus sueños en un exclusivo sector en la capital del Atlántico, así como camionetas y ropa, por lo que se convirtieron en asiduos clientes de las tiendas de Salvatore Ferragamo y Carolina Herrera. Para el fiscal del caso, Mario Burgos, pese a ostentar el cargo de diputado, el dinero no le daba para tanto.

“No son el resultado y fruto de su trabajo, sino de los constantes ingresos clandestinos de dinero desde mayo de 2021 hasta finales del año 2022, recibidos en efectivo, en cifras cerradas en pesos, en diferentes oportunidades, de manera consciente y voluntaria, y ajenas a su actividad económica de diputado”, se destaca en uno de los apartes del escrito de acusación de 83 páginas que está en mora de ser presentado por las maniobras dilatorias de la defensa de Nicolás Petro.