Nación
Juez no aceptó preclusión y el proceso contra el expresidente Álvaro Uribe sigue vivo
Luego de estudiar los argumentos de la Fiscalía, que pidió la preclusión, la juez les dio la razón a las víctimas.
La Fiscalía no escatimó en tiempo y argumentos. Desde que tuvo la posibilidad de intervenir pidió a la jueza 28 Penal de Conocimiento que precluyera la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe por manipulación de testigos.
La jueza, luego de escuchar los argumentos de todas las partes, se inclinó por los hechos a cargo de las víctimas, y ordenó continuar con la investigación en contra del exmandatario.
Fue poco más de un año de diligencias, argumentos, exposiciones jurídicas, regaños, discrepancias, burlas y hasta compulsa de copias. La audiencia de preclusión fue un espectáculo judicial que incluso se recomendó a estudiantes de derecho. En el escenario virtual estaban grandes personalidades del derecho y las intervenciones estuvieron a la misma altura.
La jueza tuvo que lidiar con los intereses, las diferencias políticas y hasta fue víctima de amenazas e injurias. En la audiencia, la jueza fue pausada, mantuvo el orden y tuvo que llamarles la atención a personajes como el exfiscal Eduardo Montealegre y también al expresidente Uribe, que quiso cerrar la audiencia con un emotivo pero frustrado discurso.
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En su decisión hizo un resumen desde que la Corte Suprema de Justicia se abstuvo de investigar al senador Iván Cepeda y, al contrario, ordenó la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe. Luego se refirió a cómo pasó el proceso a manos de la Fiscalía, tras la renuncia de Uribe a su fuero como senador, y a las discusiones sobre bajo qué ley se cobijarían las actuaciones de la Fiscalía.
“La Fiscalía no logró demostrar la aticipidad de las conductas investigadas de fraude procesal en el caso de los testigos que fueron abordados por Diego Cadena y Juan José Salazar, para ser escuchados con los ofrecimientos económicos y de apoyos jurídicos”, señala la decisión.
La jueza anticipó que la lectura sería larga, al punto de que era necesario solicitar la ayuda del oficial mayor del juzgado para completarla. Los detalles fueron en minucia y con un momento especialmente largo para analizar la intervención de la Fiscalía con los seis hechos que, a su consideración, eran el soporte legal para pedir la preclusión en favor del expresidente Uribe.
“La Fiscalía se propuso tener en cuenta toda la actividad probatoria adelantada por la Corte Suprema de Justicia considerando los argumentos expuestos por la Sala de Instrucción en el escenario que resolvió la situación jurídica del expresidente Álvaro Uribe, resaltó que en todo caso la actuación probatoria hecha por la Corte Suprema Justicia era en la necesidad de resolver una medida de aseguramiento”, dijo la juez en su lectura.
La juez transitó con cuidado por cada hecho enunciado por la Fiscalía. Fueron seis los expuestos por el fiscal Gabriel Jaimes en sus siete días de intervención, con los argumentos para insistir en la preclusión de la investigación por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal que se adelantó contra el expresidente Uribe.
Después de analizar los argumentos de la Fiscalía, la jueza pasó a los expuestos por las víctimas, la Procuraduría y la defensa. Todos fueron revisados antes de la decisión. La juez leyó buena parte de las intervenciones y de cómo bajo su criterio era necesario continuar con la investigación o precluirla, según fuera el caso.
“La defensa denominó ‘elástica’ la calificación incluso utilizada por la defensa material en cabeza del doctor Álvaro Uribe Vélez para afirmar que para el exsenador tampoco quedaba claro cuáles eran las conductas por las que se lo investiga, como se ha descrito. El desconocimiento de la imputación definitiva previo a la resolución de acusación es un efecto connatural al trámite de la investigación en el procedimiento de la Ley 600″, dijo la juez.
Con la decisión de no precluir la investigación contra el expresidente Uribe, el proceso pasará a la etapa de juicio y se ordena a la Fiscalía continuar con las indagaciones. La Defensa, la Fiscalía y la Procuraduría apelaron y así pasará a la segunda instancia en el Tribunal Superior de Bogotá, donde revisarán nuevamente el material probatorio para confirmar o derrumbar la posición de la jueza. Así las cosas, el proceso se extenderá por algunos meses más.
Uribe imputado
La jueza aseguró que tras el estudio de los elementos presentados o trasladado por la Corte Suprema de Justicia en el marco de la investigación contra el expresidente Álvaro Uribe, coinciden con lo dicho por otra jueza, al advertir que la indagatoria al exmandatario en la Corte es igual o equiparable con la imputación de cargos y, por tanto, no comparte los argumentos de la defensa del expresidente y así lo dejó sentado en su decisión.
En su lectura, la jueza acudió a varias sentencias de la Corte Suprema y Constitucional para explicar por qué algunos elementos y reparos de la defensa del expresidente no tenían soporte legal, como reprochar las interceptaciones a las comunicaciones que hicieron los investigadores a cargo de la Corte y donde se conocieron detalles de la investigación.
La decisión
El debate de la jueza estuvo en los elementos de atipicidad que esbozó la Fiscalía y la comisión o no de las conductas de fraude procesal y soborno en actuación penal endilgadas al expresidente Álvaro Uribe. En criterio del despacho, hay dudas en las declaraciones de testigos; incluso del mismo exmandatario respecto de los detalles materia de indagación, principalmente en el momento en que pidió una carta para enviar a la Corte Suprema de Justicia.
Para la jueza es claro que existe inferencia razonable de autoría o participación en la comisión de las conductas que por el contrario la Fiscalía intentó precluir en su solicitud: fraude procesal y soborno en actuación penal. Sin embargo, aclaró la jueza que con su decisión no hace responsable al expresidente Uribe de la comisión de esos delitos, solo de que existe la probabilidad de la ocurrencia de las conductas punibles.
En todos los hechos enunciados por la Fiscalía, los seis que presentó en su argumentación para pedir la preclusión, a criterio de la jueza, no fueron de recibo, pues el fiscal del caso no logró derrumbar la inferencia razonable valorada por la Corte Suprema de Justicia en la investigación que incluso ayudó a construir la misma Fiscalía.
La defensa de víctimas logró, según la jueza, demostrar y construir una hipótesis de tipicidad del fraude procesal, luego de demostrar cómo las declaraciones de los testigos de la Fiscalía llegaron a conclusiones opuestas, pues no recuerdan fechas y, al contrario, sí las reuniones con el senador Iván Cepeda.
“El despacho estima que se puede afirmar razonablemente una hipótesis de tipicidad de la conducta de fraude procesal en relación con el manuscrito remitido por (alias) Racumín y que a través de la defensa técnica se llevó a la Corte Suprema de Justicia”, dijo la jueza.