Atención | Videos e imágenes muestran en qué condiciones están en la cárcel exmilitares colombianos en Haití

Desde su detención, ningún familiar ha podido hablar con los exmilitares que están en Haití, acusados de participar en el asesinato del presidente Jovenel Moïse. La periodista Salud Hernández-Mora relata que ellos han hecho llegar cartas a la Defensoría del Pueblo y a la Cancillería para conocer cuál es el estado de sus seres queridos y solicitar que los asistan en el proceso. Lo mismo han hecho los familiares de los tres colombianos muertos que están a la espera de una repatriación de sus cuerpos.

De esas condiciones se sabe muy poco. En las últimas horas, medios locales hicieron públicas algunas imágenes y fotografías en las cuales se ve a los colombianos detenidos en la sede de la Policía de Haití.

En estas se ve a los colombianos sentados en un butaco de madera, casi que desplomados del cansancio. Dos de ellos no tienen zapatos y los otros duermen sobre sus brazos cubriéndose el rostro.

El video muestra a algunos de ellos, también descalzos, mientras su calzado se encuentra arrumado en una esquina. Uno de los colombianos se ve acurrucado en el piso con visibles señales de dolor, llorando. Mientras otro lo ve perplejo a su lado.

Otras imágenes los muestran, al parecer apenas llegaron al penal, amarrados con sus manos en la espalda y visiblemente golpeados.

En un video desde Puerto Príncipe, el pasado domingo, la periodista Salud Hernández-Mora aseguró que mientras buena parte de la opinión pública nacional e internacional ya condenó a los colombianos, un grupo de expertos en criminalística están haciendo acopio del material que hay en el proceso para defenderlos.

Por ahora, se sabe que mucho se ha llevado con irregularidades procesales. “No hubo cadena de custodia, no se sabe cómo se hizo el levantamiento del cadáver, los colombianos no tienen asistencia de ningún abogado”, agrega.

La periodista llegó el sábado a la sede de la Policía Nacional de Haití, donde están los colombianos detenidos. “No han tenido derecho a nada. Ni una llamada a la familia”, aseguró Hernández-Mora desde la puerta del edificio donde permanecen privados de la libertad a la espera de que avance el juicio por el magnicidio.

SEMANA reveló en su portada el impactante interrogatorio a tres de los exmilitares colombianos que participaron en ese asesinato. Los colombianos han entregado a la Policía datos impactantes; por ejemplo, que cometieron el crimen con ayuda del cuerpo de seguridad del presidente y de miembros de la misma Policía.

“Nos dijeron que también había una persona que estaba allá en el sitio, infiltrada”, sostuvo el soldado retirado Juan Carlos Yepes Clavijo, quien se quebró y confesó todo tras esta semana.

Por cuenta de este asesinato, en Haití ha crecido un rechazo hacia los colombianos. Así lo relató Hernández-Mora en sus reportajes enviados desde la isla.

“Blanca, colombiana, no pasar”, le solían decir cuando salía a la calle a su trabajo de reportería. Es una ola que se expande por la ciudad y tal vez por el resto del país. “No queremos colombianos, aunque fuera mal presidente, no pueden venir a matarlo”, expresa un joven de unos 25 años. “¿Qué pensarían en Colombia si haitianos se meten en la casa de su presidente y lo asesinan?”.

Otro de los aspectos que ha causado gran molestia y fuerte reacción del Gobierno haitiano han sido las informaciones surgidas en Colombia la semana pasada sobre la responsabilidad directa del primer ministro encargado, Claude Joseph, en el crimen del presidente.

La Policía Nacional salió a desmentir que el cuestionado mandatario estuviera involucrado –hay otros dos que reclaman el cargo de Moïse para ellos–, asegurando que no hay pruebas que lo vinculen con la operación.

El rechazo actual hacia los nacionales colombianos también ha acrecentado la indiferencia natural hacia las condiciones que sufren los exmilitares presos. Les han violado las mínimas garantías que tiene un detenido, por cualquiera que sea su crimen, asegura Salud Hernández-Mora.

Tampoco las autoridades locales han facilitado información sobre la repatriación de los tres cadáveres. En todo caso, lo que está descartado, conforme a informaciones que ha conocido SEMANA, es que estén sometidos a torturas, como temen sus allegados por las noticias falsas que se difunden por redes sociales.

Es tal el cúmulo de desinformación, que incluso las familias de los fallecidos temen que los cuerpos no los conserven en buen estado para que puedan recibir sepultura en Colombia más adelante.

Los 18 capturados permanecen detenidos en las instalaciones de la Policía Central Judicial, cuya sede se encuentra cerca del aeropuerto. El FBI, que aterrizó en la noche del miércoles en Puerto Príncipe, tiene planeado interrogarlos. Aunque los sargentos Romero y Capador, muertos durante la fuga, conocían todos pormenores del operativo, también el capitán Rivera era una ficha clave.

La Cancillería colombiana está haciendo todos los preparativos para que el actual Gobierno de Haití permita la entrada de una comisión que asista a los detenidos y consiga que dejen trasladar los cuerpos de los fallecidos a Bogotá cuanto antes. El 25 de julio llegará una delegación colombiana a la isla para acompañar el proceso y ver las condiciones en que se encuentran los colombianos.