Autoridades investigan cobros ilegales del espacio público a vendedores informales en el centro de Bogotá

El Instituto para la Economía Social, IPES, le confirmó a SEMANA que entre $ 100.000 y $ 150.000 estarían cobrando personas inescrupulosas a vendedores informales, sobre todo en el centro de Bogotá, para la utilización del espacio público, práctica que está prohibida en Colombia.

“Las disposiciones previstas en la Ley 1801 de 2016, son de carácter preventivo y buscan establecer las condiciones para la convivencia en el territorio nacional al propiciar el cumplimiento de los deberes y obligaciones de las personas naturales y jurídicas”. Confirmó Andrés Sánchez, jefe de comunicaciones IPES.

Durante la jornada de este miércoles, gestores del IPES, junto con la policía metropolitana, recorrieron el sector del popular San Victorino entregando volantes con el fin de concientizar a los vendedores informales para que tengan en cuenta que los trámites y actividades del IPES son gratuitos, así mismo se les está invitando a respetar y acatar las normas.

La entidad ha recibido de manera verbal varias denuncias de venta irregular de algunas áreas en el espacio público. Hicieron un llamado a los vendedores informales para que no caigan en manos de personas inescrupulosas, porque el espacio público no tiene precio.

“No vamos a permitir que personas inescrupulosas se aprovechen de la necesidad de los vendedores informales para vender el espacio público”. Manifestó Sánchez.

Cualquier irregularidad que se presente en el espacio público, la entidad competente para intervenir es la Alcaldía Local y a través de la autoridad de policía de esa localidad, establecen el orden y la recuperación del espacio público brindando acuerdos de convivencia y seguridad, sobre todo ante algunos videos que circulan en redes sociales donde dos mujeres sostienen una riña al parecer por el espacio público.

‘Pacto para el comercio ambulante’:

El Instituto para la Economía Social ha adelantado, durante el 2022, estrategias para regular la venta ambulante en la carrera séptima, en el centro de Bogotá. El director de la entidad, Alejandro Rivera, dice que en Bogotá son cerca 87.000 ciudadanos que se dedican a las ventas informales en las 20 localidades y para evitar la invasión del espacio público, vienen trabajando un pacto de autorregulación para garantizar el derecho al espacio público, además de el derecho al trabajo de los vendedores informales.

“Nos estamos comprometiendo a ordenar la séptima, a crear normas de convivencia y que podamos hacer de la séptima ese corredor histórico de turismo”. manifestó Rivera.

Otras de las problemáticas que tiene el centro de la capital, es el manejo de las basuras y la venta de estupefacientes, las denuncias que llegan a las autoridades son varias, por ello el director también indicó que con la policía avanzan para disminuir la venta y consumo de drogas, ya que, por ejemplo, la carrera séptima debe ser utilizada para su principal fin que el disfrute del corredor turístico que mueve la economía en el sector.

Panorama de la venta informal en Bogotá:

El informe más reciente del Instituto para la Economía Social en la capital reveló que 87.876 ciudadanos se dedican al comercio informal, quienes se dedican a esta actividad prefieren hacerlo en el sistema integrado de Transmilenio, ya que 2.019 de personas vende artículos a quienes utilizan el servicio.

Sin embargo, a las autoridades les preocupa quienes se dedican a la venta de droga en la capital que se estarían camuflando, haciéndose pasar como vendedores de ropa de segunda mano en la carrera séptima entre la calle 13 y la calle 26. Por ello, con el programa “Vive la séptima” de la Alcaldía mayor de Bogotá, el Instituto para la Economía Social – IPES y las Alcaldías Locales de Santa Fe y La Candelaria, firmaron el acuerdo para la Reorganización del Espacio Público de la carrera séptima, entre las calles 11 y 24.

En el que buscan: Asignar espacios fijos debidamente delimitados, que el área acordada para cada vendedor informal sea de máximo 1.50m x 1.50m, donde podrá organizar su puesto de trabajo, embellecimiento del espacio público en el corredor de la Carrera 7 y acompañamiento a las acciones de sensibilización y diálogo.