E N T R E V I S T A
Avianca: sale Lenis
La venta de la aerolínea depende en buena medida de la capacidad del Grupo para capitalizar la empresa.
El relevo en Avianca tiene como propósito la reestructuración financiera de la empresa como paso anterior a su venta a las aerolíneas de Estados Unidos. SEMANA habló con su presidente saliente, Gustavo Lenis.
SEMANA: Ha sido un poco sorpresivo el anuncio de su salida. ¿Por qué sale de Avianca?
Gustavo Lenis: Me retiro de Avianca, aunque suene a lugar común, porque siento que he cumplido un ciclo. Durante los ocho años que estuve al frente de la compañía Avianca se internacionalizó, giro que le puede significar a la compañía ingresos por 70 millones de dólares anuales. En lo técnico, Avianca es la única empresa, hoy por hoy, que puede dar mantenimiento a las aerolíneas europeas en Latinoamérica. En equipos, no es un secreto que hemos dado un salto cualitativo. Modestia aparte, yo modernicé a Avianca. Es evidente que Avianca todavía tiene un lastre enorme: un pasivo pensional de 250 millones de dólares y una inadecuada estructura de costos (nuestro combustible es, por ejemplo, casi un 20 por ciento mas caro que en el exterior). Se trata de aspectos de carácter más financiero que operativo. A mí me entregaron una compañía vieja y nacional. Yo entrego una empresa internacional y moderna. El nuevo ciclo necesita un experto financiero que la aliste para la nueva etapa de globalización.
SEMANA: ¿En qué queda el proceso de búsqueda de socios extranjeros o de venta de Avianca?
G.L.: La posición que ocupamos en el mapa hace que Avianca sea el socio ideal para el que quiera entrar a América Latina. En lo operativo y lo empresarial Avianca está lista. Pero mi experiencia en este proceso es que hay que hacer financieramente viable a Avianca primero y buscarle marido después.
SEMANA: ¿Pero el proceso, a su juicio, avanzará con Aces, con Continental o con American?
G.L.: Yo considero que una alianza con Aces sería muy conveniente para las dos empresas y para el país. Hay que hacerla. Creo además que Avianca sería un socio importantísimo para cualquiera de las tres compañías que se pelean el mercado suramericano. Me refiero a Delta, Continental y American. Mire, a Avianca le sobran socios. Eso es fácil. El problema no es sólo con cuál sino qué tipo de negocio le conviene más a Avianca. Avianca es la mejor novia de Suramérica.
SEMANA: ¿Cómo quedan sus relaciones con el Grupo Santo Domingo?
G.L.: Muy bien. Esta ha sido una transición normal. Voy a seguir colaborando en algunas empresas del Grupo, voy a ayudar a Bernardo Quintero, el nuevo presidente, en el tema de Avianca, todo lo que necesite. La vieja época en que los presidentes de Avianca salían por la puerta de atrás ha quedado superada.
SEMANA: Sin embargo, cuando un presidente de Avianca sale de la empresa sin destino conocido, hay suspicacias.
G.L.: No hay ninguna suspicacia. Yo cumplí mi ciclo. Me voy a quedar un tiempo asesorando el proceso de Avianca, la creación de un portal de Internet alrededor de Descubra y otras empresas del Grupo, como el Fondo de Internet de Valores Bavaria. Pero le repito, yo creo que mi ciclo en la industria aérea ha terminado. Quiero incursionar en otras áreas. Y de resto, me dedicaré a la bicicleta de montaña.