Bogotá: Contraloría investiga presuntas irregularidades en construcción de nueva sede del Hospital de Meissen

La Contraloría de Bogotá inició varias investigaciones por presuntas irregularidades en la construcción de dos importantes obras para la ciudad para determinar posibles responsabilidades fiscales.

Así lo anunció el organismo de control al revelar que se adelantan estos procedimientos investigativos en las obras para la construcción de las nuevas sedes del Hospital de Meissen en el sur de Bogotá y de la Alcaldía Local de Teusaquillo, en zona céntrica de la ciudad.

Dentro de ese proceso, la Contraloría de Bogotá recorrió la Torre dos del Hospital de Meissen -cuya construcción inició en 2006- y la edificación de 12 pisos que alojará la Alcaldía Local de Teusaquillo -que lleva en obra desde 2016-, con el propósito de verificar el avance físico y recursos invertidos en ambos proyectos de infraestructura.

En el caso de la Torre dos del Hospital de Meissen, el ente de control tiene en proceso 3 hallazgos fiscales relacionados con la obra, por más de $8.600 millones. Desde el 2006 se proyectó su construcción, para la cual se asignaron $ 67.352.000.000 (convenio 903/206).

Sin embargo, en 2010 el proyecto se suspendió por incumplimiento del objeto contractual y se retomó en 2017 -bajo el convenio interadministrativo 1186-2017-, con nuevos diseños y contratos por un valor de $17.047.632.177.

Hoy, la torre 2 del Hospital tiene un avance físico del 28 %. Este centro hospitalario, ubicado en la localidad de Ciudad Bolívar, atiende un promedio de 1 millón 500 mil habitantes. “Vamos a conformar una mesa de seguimiento especial a esta obra. Queremos que las inversiones de ciudad culminen exitosamente”, indicó el contralor distrital Andrés Castro Franco.

Respecto a la Alcaldía Local de Teusaquillo, se estableció un hallazgo administrativo con incidencia fiscal, y presunta incidencia disciplinaria y penal, por $1.400 millones, relacionado con la aprobación y uso indebido del anticipo en la construcción de esta nueva obra.

Este proyecto –sobre el cual se han presentado 63 quejas de vecinos por afectación a terceros en los predios aledaños a la construcción de la nueva sede- tuvo un valor inicial de 22 mil millones de pesos y una adición de $7.600 millones. Hoy, tiene un avance físico cercano al 82 %.

La obra ha sido suspendida dos veces, tiene cuatro prórrogas y presenta un atraso general de 17 meses. En su ejecución se han realizado ajustes a los diseños estructurales y eléctricos.

“Nos comprometemos a darles celeridad a los procesos de responsabilidad fiscal relacionados con ambos proyectos”, afirmó el Contralor de Bogotá, Andrés Castro Franco, al término de las visitas técnicas a las construcciones.

Otra denuncia desde el Concejo de Bogotá

Desde el Concejo de Bogotá se denunciaron graves irregularidades en la atención de los animales que están a cargo del Instituto de Protección Animal debido a demoras en el proceso de contratación para cumplir con esta labor.

La cabildante Andrea Padilla señaló que “la mala planeación y el rezago en los procesos contractuales de esa entidad están afectando a los animales. Si a estos hechos le sumamos el maltrato a animales por negligencia en la Unidad de Cuidado Animal, según evidencias presentadas por la mesa ciudadana de proteccionistas, el panorama es desolador”.

“Es urgente revisar qué ocurre en la entidad y tomar los correctivos”, indicó la concejal animalista.

De acuerdo con las pesquisas realizadas por el equipo de trabajo de la concejal Padilla a través del Sistema electrónico para la contratación pública Secop se logró determinar que:

1. No hay contrato para atender urgencias en la Unidad de Cuidado Animal. El contrato nº 234 de 2020 para la atención veterinaria de los animales que se encuentran en la Unidad de Cuidado Animal terminó el 1 de marzo y no será adjudicado (o declarado desierto) sino hasta el 26 de abril, debido a que el nuevo proceso contractual fue publicado, apenas, el 4 de marzo.

2. Hay retraso en las obras de la Unidad de Cuidado Animal. El contrato de obra pública nº 543 de 2020 que fue adjudicado el 22 de diciembre de 2020 no ha iniciado aún por demoras en la contratación de interventoría. Estas obras incluyen la adecuación de la zona de quirófanos donde se habrían podido atender algunas de las urgencias, ahora que la entidad no ha suscrito contrato con ninguna clínica operadora.

3. Los veterinarios fueron contratados tarde. El Instituto inició la contratación del recurso humano, apenas el 1 de febrero; la de los veterinarios es la que más se ha tardado. Solo hasta finales de febrero y comienzos de marzo la entidad empezó a suscribir esos contratos, pese a que son el principal soporte de los programas misionales de la entidad.

Además, al 9 de marzo el Instituto solo había suscrito el 58% de los contratos de prestación de servicios programados para el primer trimestre de 2021, según el plan anual de adquisiciones.

4. Se completaron tres meses sin esterilizaciones. Las últimas jornadas de esterilización fueron el 7 de diciembre de 2020. El nuevo contrato fue adjudicado el 4 de febrero de 2021, pero hasta el 9 de marzo no se había suscrito aún su acta de inicio. Se completan así más de tres meses sin jornadas gratuitas de esterilización, lo que aumenta la natalidad de animales sin hogar. Además, el Instituto solo proyecta realizar 35 mil esterilizaciones este año, lo que regresará a la ciudad a los años 2013 y 2014. En el Plan de Desarrollo se aprobaron 356.000 esterilizaciones.