Bucaramanga, miércoles 8 de junio. Estadio Alfonso López.
Bucaramanga, miércoles 8 de junio. Estadio Alfonso López. | Foto: Esteban Vega La Rotta

ELECCIONES 2022

Bucaramanga pierde la primera de sus dos finales: en el Alfonso López ahora sueñan con la presidencia

Si el sueño del departamento de colgar la primera estrella en el escudo de su equipo de fútbol se aplazó nuevamente, que uno de sus paisanos sea el “campeón” en las elecciones presidenciales es el nuevo motivo de ilusión. ¿Rodolfo o Petro?, a boca de tribuna. SEMANA, desde la ciudad de los parques.

13 de junio de 2022

LA NOCHE DE LOS CANARIOS AFILADOS

De los enviados especiales. Piedecuesta y Bucaramanga, Santander.

El miércoles, a la misma hora en que se conoció la noticia del viaje de Rodolfo Hernández a Miami, desde la pista del internacional Ernesto Cortissoz de Barranquilla, el cuerpo de un niño de apenas trece años era velado en la única sala de la funeraria San Francisco Javier, en la esquina de la carrera octava con octava, en Piedecuesta, Santander, donde hace 77 años nació quien podría convertirse en el primer garrotero en ser el presidente de Colombia.

Las dos finales por las que palpita Santander

Apenas cabía el ataúd, un par de cirios, y entre cinco y seis personas, seguramente, los familiares más cercanos del menor, protagonista del más escabroso titular con que los colombianos amanecieron la mañana del martes 7 de junio: “Niño de 13 años fue asesinado a cuchillo por un amigo en Piedecuesta, Santander”.

En esa esquina, donde se alcanzaba a escuchar el “brille para él la luz perpetua”, incluso desde la acera de enfrente, no se podía caminar. En los andenes, como en una fila india de hormigas, evitaban estrellarse los estudiantes de primaria que salían de clase, los de bachillerato que apenas comenzaban, decenas de amigos y amigas del menor, todos con la camiseta amarilla del Atlético Bucaramanga.

Piedecuesta, Santander. Miércoles 8 de junio de 2022. Amigos del niño de 13 asesinado a cuchillo, el día de su funeral.
Piedecuesta, Santander. Miércoles 8 de junio de 2022. Amigos del niño de 13 asesinado a cuchillo, el día de su funeral. | Foto: Esteban Vega La Rotta

Porque después de la última bendición de la cristiana sepultura, secaron sus lágrimas, dieron la espalda al pasado, y dieron cara al compromiso que su equipo tenía en la noche, en el estadio Alfonso López, donde el menor de trece años iba siempre que jugaban los Leopardos, el representante que el departamento ha tenido desde 1949, en la segunda edición del campeonato de fútbol, el que hasta la fecha nunca ha ganado.

El niño de trece años debió haber salido, a la misma hora en que Rodolfo Hernández sobrevolaba un vuelo comercial hacia el Aeropuerto Internacional de Miami, hacia la carretera principal para tomar el bus hasta el estadio, donde tenía boleta para la tribuna sur, la de la barra Fortaleza Leopardo Sur.

El cortejo fúnebre atravesó el parque de Piedecuesta, único entre los 1103 municipios de Colombia, a solo 16 kilómetros al sur de Bucaramanga, por tener dos templos, apenas separados por un edificio de fachada blanca, y banderas de Santander y de Colombia, a lado y lado del escudo: el Palacio Municipal.

Piedecuesta, único pueblo de Colombia con dos iglesias, apenas separadas por el despacho del alcalde. Allí nació Rodolfo Hernández hace 77 años.
Piedecuesta, único pueblo de Colombia con dos iglesias, apenas separadas por el despacho del alcalde. Allí nació Rodolfo Hernández hace 77 años. | Foto: esteban vega la-rotta-semana

A pocas cuadras, dos garroteros, como se le llama a los piedecuestanos como si se tratara de su verdadero gentilicio, se desafiaban. No a garrote, como señala la tradición. A puñal.

Miércoles 8 de junio de 2022. Riña en plena calle de Piedecuesta.
Miércoles 8 de junio de 2022. Riña en plena calle de Piedecuesta. | Foto: Esteban Vega La Rotta

Aunque parecía noche de fiesta, el partido calentó a los bumangueses que iban para sus casas o repartían pedidos a domicilio, pues una de las vías principales fue inhabilitada por la policía, en inmediaciones al Alfonso López. El mal humor se percibía, y cualquier palabra bonita, como la ciudad, podría ser una humillante ofensa, por el tono en el que fuera pronunciada.

Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López, tribuna sur. Atlético Bucaramanga.
Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López, tribuna sur. Atlético Bucaramanga. | Foto: Esteban Vega La Rotta

El humo y los cantos de la barra donde el niño de 13 años, asesinado a puñal por uno de sus amigos en Piedecuesta, debía estar con quienes de verdad dicen ser sus amigos, incapaces de clavar el cuchillo, en el cuello, como reseñaron las noticias de todos los diarios bumangueses.

El mal humor y las sirenas, estruendos de lo que en la tribuna decían “papa bomba”, era lo que puso a mil los corazones, de nervios por el partido y angustia por lo que sucediera en la calle de la tribuna occidental, la única con dos pisos del estadio.

Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López. Una mujer y sus hijos entre agentes del Esmad.
Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López. Una mujer y sus hijos entre agentes del Esmad. | Foto: Esteban Vega La Rotta

Como ese corazón de una mujer angustiada, cargando a uno de sus hijos en los brazos, e intentando que el otro no se soltara de su pierna, quedó entre tres agentes del Esmad que la acorralaron. Gritos de espanto que fueron conjurados por la intervención de los propios bumangueses. Bajaron sus escudos y sin pedir perdón por tan violenta reacción, así hubiera sido producto de un malentendido.

Tatuaje, Atlético Bucaramanga
Tatuaje, Atlético Bucaramanga. | Foto: Esteban Vega La Rotta

“Santandereano, siempre adelante; siempre adelante, ni un paso atrás”, era parte de la letra del himno que entonaron 23.000 hinchas, en un estadio sencillo, cómodo, pero quizás en el que mejor ambiente se respira en Colombia para ver el fútbol, por su ubicación, el pequeño boulevard entre árboles para llegar a la tribuna; abuelos, abuelas, esposos, novios, hijos e hijas, pues esa noche, la de los canarios afilados, la mitad de sus asistentes eran mujeres, a vista de turista bogotano. Así es el Alfonso López de Bucaramanga, donde una tarde o noche de partidos se pueden encontrar las hinchas más bonitas del país.

Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López, tribuna sur. Atlético Bucaramanga.
Miércoles 8 de junio de 2022. Estadio Alfonso López, tribuna sur. Atlético Bucaramanga. | Foto: Esteban Vega La Rotta

La cara de los hinchas en el primer tiempo era como si se les hubiera escapado la presidencia de la República, con la que muchos (no el ciento por ciento) sueñan y se desvelan. Lo que sentían era la oportunidad de hacer la fila para el baño y comprar líquido y comida con cuatro goles de ventaja sobre su rival, que nunca se acercó a la portería, solo una vez cuando el santandereano Mantilla intentó engañar al árbitro, y a sus paisanos, simulando una falta para sancionarla como pena máxima. “Los santandereanos somos frenteros”, decían antes de soltarle un madrazo del tamaño del HP, como en Piedecuesta se lee en la publicidad que sus propios habitantes le imprimieron a Rodolfo Hernández, candidato presidencial: “Sí HP, Hijo de Piedecuesta”. El HP a Mantilla no tenía el mismo humor.

Rodolfo Hernández, natural de Piedecuesta, Santander.
Rodolfo Hernández, natural de Piedecuesta, Santander. | Foto: Esteban Vega La Rotta

Con el marcador en contra, la gente ya no lo podía creer. Tener noqueado y tambaleado a su oponente, y por inexperiencia, lo dejaron con vida. Hasta la muerte parecían resolverse en la tribuna algunas diferencias tan sencillas como “¿por favor me da permiso?”, en noche en la que Bucaramanga fue más Leopardo que nunca, pero terminó siendo inofensiva como el canario, apodo con que los locutores rodeaban de color sus transmisiones radiales, con el amarillo de la camiseta del equipo que nunca ha salido campeón.

Estadio Alfonso López, Bucaramanga. Tribunas calientes.
Estadio Alfonso López, Bucaramanga. Tribunas calientes. | Foto: Esteban Vega La Rotta

A boca de tribuna, la mayoría de los aficionados culpó al árbitro por la derrota del equipo, solo los veteranos, los de la edad de Rodolfo Hernández (77), admitían que el fallo obedeció a la cantidad de oportunidades claras de gol que sus jugadores dilapidaron. En días de rumorología, muchos se miraron con ojos de sospecha, con las dos que perdió Dayro Moreno, quien días atrás había pedido perdón en el Atanasio Girardot por haber marcado un gol, el día en que Rodolfo Hernández fue recibido con los gritos de “presidente, presidente”.

Bucaramanga, estadio Alfonso López. Tribuna occidental, primer piso.
Bucaramanga, estadio Alfonso López. Tribuna occidental, primer piso. | Foto: Esteban Vega La Rotta

El paso a la final del fútbol colombiano quedó entre barranquilleros y paisas, por lo que el partido contra Millonarios, que ya tenía la boletería casi que agotada, apenas servirá para un amistoso duelo, para verlo en familia, entre los equipos que salían con espíritu santandereano, “siempre adelante”.

El 19 de junio, Bucaramanga y Santander puede convertirse en un Alfonso López de dos millones de personas, con camisetas amarillas, yendo a las urnas a disputar la otra final que les resta. Las urnas dirán si santandereano vota santandereano.

Bucaramanga, Estadio Alfonso López.
Bucaramanga, Estadio Alfonso López. | Foto: Esteban Vega La Rotta