Buscarán congelar los salarios de los congresistas por cinco años

Desde hace un tiempo se viene hablando de que los congresistas puedan ajustar sus salarios, ya que a diferencia de otros países –y del salario mínimo en Colombia, que está en 908.526 pesos–, la suma que ellos ganan es bastante alta. Un congresista devenga actualmente 35.621.000 de pesos. Y en 2021 tuvieron un aumento de 1,2 millones de pesos.

A eso hay que sumarle que el Congreso actualmente no cuenta con la mejor popularidad. Según la más reciente encuesta Invamer, esta corporación tiene el 87 % de desaprobación, una cifra bastante alta que puede verse traducida en la falta de iniciativas que le sirvan a la coyuntura del país y la imagen que tienen los ciudadanos de sus parlamentarios.

Por eso, el senador Rodrigo Villalba, del Partido Liberal, acompañado de otros 13 congresistas de esa bancada, radicaron en el segundo día de legislatura un proyecto para congelar esos salarios por 5 años.

En esencia, el proyecto es muy sencillo, pero los retos no son menores. Lo que propone es ajustar el artículo 187 de la Constitución, que establece que cada año se hace el reajuste de las asignaciones de los miembros del Congreso. La idea es adicionarle un parágrafo transitorio que establezca que durante los próximos cinco años de promulgada la ley no se hará esta modificación.

El primer problema con el que cuenta el proyecto es que es un acto legislativo, lo que significa que busca modificar la Constitución y que, por lo tanto, necesita de ocho debates para ser aprobado. Además, se darán en el último año de legislatura, generalmente el menos productivo.

El otro inconveniente es que, como ya se ha visto cuando surgen este tipo de iniciativas, a los mismos congresistas les cuesta reformarse y más si se verán directamente afectados. El lado positivo es que de aprobarse entraría a regir a partir del próximo año, es decir, cuando lleguen nuevos parlamentarios al Congreso; sin embargo, este ha sido un argumento que ya ha salido a flote en el que dicen que no es justo cambiar las reglas de juego por quienes no pueden decidir.

Otro cuestionamiento que deberán sortear los autores es que en el parágrafo que se incluirá se habla de que la medida cobijará a todos los servidores de la rama pública que devenguen más de 20 salarios mínimos. Allí podrían estar incluidos magistrados de las altas cortes, trabajadores de la rama ejecutiva o directores de empresas y entidades públicas, entre ellos los que administran recursos parafiscales. En ese sentido, al parágrafo se le hace una excepción y se aclara que la medida no aplicaría a miembros del cuerpo diplomático que representen a Colombia en el exterior.

Entre los argumentos que presentan los liberales para radicar este proyecto está que Colombia es uno de los países más desiguales a nivel salarial. “La medida de desigualdad más conocida, el índice de GINI, arroja para nuestro país una cifra de 51,3 puntos”, dicen.

Por otro lado, consideran que la pandemia ha incrementado esas brechas sociales y por ello es necesario buscar alternativas para combatir la pobreza que se ha elevado en el país. “Ante este panorama no es razonable que los altos salarios del Estado, los cuales por definición son desproporcionadamente mucho mayores a la media del ingreso de los colombianos, tengan un aumento muy superior al que tiene el salario mínimo”, aseguran.

Según dicen, Colombia es el segundo país en el que los congresistas tienen el sueldo más alto, teniendo como referencia el salario mínimo, solo después de Chile. Argumentan que esa pudo haber sido una de las causas de la protesta que se originó en 2019 en ese país.

Por ahora, y a pesar de las contradicciones que se generarán, los congresistas liberales le apostarán a sacar adelante la reforma.