NACIÓN

Cae red de trata de personas que enviaba mujeres a China para prostituirlas

Las jóvenes eran engañadas y, una vez en Asia, eran retenidas hasta que pagaran una “deuda” de 14.000 dólares.

8 de septiembre de 2020
| Foto: Fiscalía General de la Nación

Jóvenes en condición de vulnerabilidad en Santander, Antioquia y otras regiones, eran el blanco favorito de una red de trata de personas que enviaba mujeres engañadas a China para prostituirlas.

La banda, desarticulada por la Fiscalía General de la Nación y la Dijín, ofrecía trabajo a sus víctimas como modelos en el extranjero y, a través de diferentes maniobras, las trasladaba a Asia.

El ente investigador anunció la captura de siete presuntos integrantes de esa red delincuencial, que operaba en Cundinamarca, Santander, Valle del Cauca y Quindío.

Entre los detenidos se encuentra Daniela Botina Ocampo, alias Barbie, quien sería la cabecilla y articuladora de todas las actividades en China.

Según la Fiscalía, un grupo en Colombia se encargaba de contactar jóvenes en redes sociales, vía WhatsApp y, en algunos casos, mediante una casa de citas con sede en Bucaramanga. Al parecer, les hacían estudios fotográficos y las convencían de aceptar propuestas para modelar prendas de vestir en China, a cambio de millonarios dividendos.

Luego, varios cómplices conseguían visas y adelantaban todos los trámites para garantizar la salida de las mujeres del país.

Ya con la documentación al día, quedaban a cargo de un componente que les suministraba dinero para costear los gastos del viaje y las entrenaba para responder las preguntas de los filtros migratorios en los aeropuertos internacionales.

Las víctimas viajaban de Bogotá a Madrid, España, desde donde eran trasladadas a Ámsterdam, Holanda, y de allí a Beijing, China.

Una vez en el país asiático, eran recibidas y llevadas hasta un establecimiento nocturno en Cantón. En ese sitio las jóvenes eran retenidas, les quitaban los pasaportes y documentos personales, y les imponían una deuda de 14.000 dólares, que debían cumplir mediante el pago de 600 dólares diarios en servicios sexuales.

Tras el operativo de autoridades, en audiencias ante un juez de control de garantías de Bucaramanga, una fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales imputó a los siete capturados por los delitos de concierto para delinquir agravado y trata de personas.