Calamidad pública en Pereira por deslizamiento de tierra

Un deslizamiento de tierra ocurrido en la mañana de este martes en Pereira ha dejado hasta el momento cinco personas muertas. Los cuerpos fueron rescatados en los más de 26 mil metros cúbicos de tierra que desprendieron en el sector conocido como La Trilladora, en la vía que conecta a los departamentos de Caldas y Risaralda con el Valle del Cauca.

Las labores de rescate aún continúan en cabeza de más de 200 hombres de la Defensa Civil y los Bomberos. Y es que según los mismos organismos de socorro, el alud se llevó por delante 12 motos y cinco carros, por lo que se estimado que bajo tierra habrían más cuerpos. Las autoridades han declarado la calamidad pública.

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Debido al alto riesgo que hay en la zona, y a que junio ha sido el mes más lluvioso en Risaralda, pues ha llovido el doble de lo que las autoridades meteorológicas habían presupuestado, cerca del lugar de la tragedia fueron evacuadas más de 200 familias que viven en la unidad residencial Portal de la Villa.

Juan Pablo Gallo, alcalde de Pereira, precisó que en la ciudad ya ajustan siete semanas de continuas lluvias, por lo que han tenidos varios deslizamientos en la vía que comunica a Manizales, ajustando más de 55 derrumbes, también en la zona urbana de la ciudad. En este caso, el derrumbe de La Trilladora mantendrá la vía cerrada tres días, siempre y cuando no llueva.

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El diario La Patria de Manizales citó la voz de varios sobre vivientes, entre ellos José Adonay Manso, quien viajaba para el municipio de Quinchía (Risaralda) “cuando sintió un estruendo y vio el lodo y las rocas”: “Fue espantoso en ese momento. Venían detrás de mí unas 12 motos y unos carros, que no vi más”. El diario también cita a Julián Andrés Silva, quien se dirigía para Armenia con un amigo al que vio morir: “Yo vi el alud que taponó a todo el mundo, a mí solo me quedó enterrada la pierna izquierda, pero salí con vida. Mi compañero Luis Fernando Osorio no corrió con mi fortuna, pues él falleció”.

Los rescatistas continúan con sus labores, sin embargo temen que la lluvia empeore la situación en la zona.