VALLE DEL CAUCA

Cali y su triste Navidad: covid en aumento, UCI llenas, ley seca y toque de queda

La ciudad tiene una ocupación de más del 90 % en las camas de cuidados intensivos, lo que originó la declaratoria de alerta roja. ¿Cómo se llegó a esto?

15 de diciembre de 2020
| Foto: Cortesía Alcaldía de Cali

Las autoridades de salud de Cali lo tenían claro desde un principio: diciembre, de por sí, es un mes complicado, pero con un pandemia sin precedentes en el mundo, todo sería cuesta arriba. Aunque en sus planes epidemiológicos no esperaban un panorama adverso tan rápido.

Los primeros días de diciembre mostraron que confiar en que la ciudadanía asumiría el autocuidado fue un error. Aglomeraciones en sitios de comercio, estancos y hasta discotecas hicieron replantear a la Alcaldía sus medidas anunciadas inicialmente. “No decretaremos ley seca ni toque de queda”, dijo el alcalde Ospina en la penúltima semana de noviembre.

Pero lo que pasó en los primeros días de diciembre echó por la borda esa afirmación. Los contagios crecieron considerablemente y de las 803 camas de unidad de cuidados intensivos, están ocupadas el 90 %. Y aún no llegan los días difíciles: novenas navideñas, Nochebuena y año nuevo.

La secretaria de Salud, Miyerlandi Torres, había advertido que seguramente Cali no podría lidiar con todas las problemáticas de diciembre –más la pandemia– con el actual sistema sanitario. “Además de la covid, en este mes también tendremos que estar pendiente de quemaduras, incremento de accidentes de tránsito, agudización de enfermedades cardiovasculares por la ingesta desmedida de alcohol y heridas por riña”.

Y a pesar de que la Feria de Cali –principal evento cultural y artístico de la ciudad– será virtual, en el imaginario colectivo, esos días son de fiestas, rumbas en el barrio, con los vecinos, con familiares y amigos. No importa el lugar, en todo caso, diciembre para la capital del Valle es sinónimo de alegría y gozo.

El alcalde Ospina creyó que sin medidas restrictivas podría solventar la situación. Y ante la disyuntiva de reactivar el comercio o encerrar a la ciudadanía, optó inicialmente por la primera. Pero quince días después reculó y este lunes en la noche anunció la extensión de la ley seca y el toque de queda, entre 11 de la noche y 5 de la madrugada, hasta el 27 de diciembre, así como el regreso del pico y cédula.

“Nuestra situación de salud producto de covid y de la carga de enfermedad represada por el cierre de servicios durante la cuarentena es realmente difícil. Comunidad caleña: lo que está en peligro es la vida de muchos, por esto escalaremos a alerta a roja. Tendremos restricciones”, dijo el mandatario.

Su decisión la sustenta en los números arrojados por el más reciente boletín epidemiológico de Cali. De acuerdo con ese documento, en la ciudad hasta la fecha se han presentado 85.011 casos positivos de covid y han fallecido 2.471 personas.

La tasa de incidencia por casos de covid-19 registrados muestra que por cada 100.000 habitantes expuestos se han presentado 3.412 casos para la ciudad. La mayor preocupación, según Torres, no está en un sector específico de la ciudad, sino en el grupo de edad entre los 15 y 41 años, que aún no asimila la covid-19 como algo potencialmente peligroso para la salud. “Son ellos los que están saliendo, yendo a fiestas u organizando reuniones entre amigos en sus casas”, dice la funcionaria.

La lucha por hacerlos entrar en razón es difícil, agrega la secretaria de Salud, pero no imposible. La Alcaldía desplegó recientemente una campaña que se llama ‘Cali, guarda la vida’, que tiene varios componentes, uno de ellos, la toma de microterritorios para hacer jornadas masivas de pruebas rápidas de covid.

A esto se le suma que los tres principales centros de salud tienen un 100 % de ocupación en camas de UCI por la aglomeración por compras navideñas en el centro de la ciudad y principales centros comerciales.