Campesinos de Ituango, en riesgo de desplazamiento por guerra criminal

El norte y el occidente de Antioquia parecen vivir una nueva oleada de violencia. En los últimos días, los enfrentamientos y las amenazas tienen confinadas a más de 120 familias de las veredas El Quindío, Quebradas del Medio, Las Arañas y El Alto del Limón, jurisdicción del municipio de Ituango. Según la Red de Organizaciones Sociales y Campesinas de Antioquia, cientos ya están abandonando sus tierras, pues la violencia es latente.

Al parecer, la tensión se debe a que en el territorio están tomando lugar las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) –también conocidas como Clan del Golfo– y las disidencias de las FARC, que estarían detrás de las rentas ilícitas y las rutas del narcotráfico. Una de las pruebas de que las condiciones no son nada fáciles es que este fin de semana el casco urbano del municipio de Sabanalarga, conectado por trochas con Ituango, amaneció con grafitis de las AGC.

Justo en las últimas horas se hizo tendencia en Twitter el hashtag SOSItuango, para llamar la atención de las autoridades sobre la difícil situación que están viviendo los campesinos de la región, que otrora fueron presionados por los frentes 36 y 18 de las FARC, además de los frentes Lechero y Mineros de las AUC, estos últimos autores de las masacres de El Aro y La Granja.

Por medio de un comunicado, la Red de Organizaciones Sociales y Campesinas de Antioquia dijo: “Mientras las AGC refuerzan sus posiciones para intentar recuperar el cañón de Santa Lucía, las FARC concentran sus hombres para impedir el avance de los mismos. 20 veredas se encuentran en alto grado de vulnerabilidad y cerca de 1.200 campesinos en riesgo por la siembra de minas antipersona, señalamientos, asesinatos selectivos y desplazamientos”.

El congresista del otrora partido FARC, Ómar Restrepo, tuiteó: “Continúa el desplazamiento de más de cien familias de las veredas Quebrada del Medio, Alto del limón, Santa Lucía y Quindío. A esta hora se concentran alrededor de 270 personas en el colegio Antonio Jota Araque y se esperan más para la tarde”.

Por su parte, José Miguel Vivanco, director de la División de las Américas de Human Rights Watch, dijo: “La situación en estas veredas de Ituango es aterradora. Según nuestras fuentes en la zona, las disidencias están obligando a la población a desplazarse y las AGC amenazan con prender fuego a las viviendas de quienes se desplacen”.

Desde hace varios años, el norte de Antioquia vive un acomodamiento de grupos armados que ha traído masacres y desplazamientos en municipios como Ituango, Briceño y Yarumal, hasta donde han llegado estructuras criminales desde el Bajo Cauca y Medellín.