Cancillería protesta por inadmisión de colombianos en México

El maltrato hacia los colombianos que llegan a México parece ser más frecuente de lo pensado, después de que se conocieran las historias de varios ciudadanos que víctimas de acoso de parte de las autoridades de ese país y de inadmisión a ese territorio.

La canciller de Colombia, Claudia Blum, envió una comunicación formal a su homólogo en ese país, en donde expresa la preocupación del Gobierno ante las reiteradas inadmisiones de colombianos que llegan a México, las que han registrado un aumento en las últimas semanas.

Ambos países tratan el tema de las inadmisiones en el grupo de trabajo sobre Asuntos migratorios y Consulares, espacio en el que dice la Cancillería que se ha reiterado la preocupación por las frecuentes inadmisiones y por las presuntas vulneraciones a la dignidad y los derechos de los colombianos por parte de la autoridad migratoria de México.

“Es importante aclarar que, en el marco de la Alianza del Pacífico, desde el 2012 los colombianos pueden entrar sin visa de turismo, negocios, tránsito y estudios, por períodos limitados. El Ministerio de Relaciones Exteriores reconoce la autonomía de cada Estado frente a la autorización de ingreso a su territorio, y espera que en el marco de la mesa de trabajo conjunta se avance en la disminución de las inadmisiones”, dice el comunicado oficial.

Las denuncias

Sólo en 2020 fueron inadmitidos más de 4.500 colombianos en México, según datos oficiales y es una situación que aún se vive y que se viene presentando años atrás.

Una persona que habló con SEMANA al respecto y que asegura haber sido víctima de lo que, para ella, es xenofobia por parte de los mexicanos, dijo que Si llega un hombre, piensan que es un delincuente, que es gota a gota, sicario o narcotraficante y las mujeres, si tienen algún atributo físico que les llame la atención, las tratan de prostitutas y prepagos”. Lo que contrasta con las cifras oficiales de ese país y de sus autoridades, según las cuales el porcentaje de criminalidad de los colombianos allí es equivalente al 0.06 por ciento.

Diego, un joven con autismo cuya pasión era dibujar que viajó a México hace algún tiempo para asistir a un encuentro de niños como él, vivió un infierno cuando aterrizó, según el relato de su mamá.

“Fue horrible como maltrataron a mi niño en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez Ciudad de México. Él es alto y fornido, a simple vista no se detecta su autismo, este solo sale a relucir en momentos de presión como el que vivió en octubre de 2019”, recuerda como el sueño de su hijo se convirtió en una pesadilla.

Le quitaron el celular y su agenda de dibujos, lo metieron en un cuarto y le gritaron durante varios minutos, a pesar de que él les explicaba una y otra vez las razones de su visita a México.

“Acercaban su cara a la mía y me gritaban que, porque hablaba así, que qué escondía. Me tiraron un lápiz y me dijeron que si era dibujante que dibujara, y yo hice un elefante que vi ahí, en un cuadro. Lo estaba dibujando con tiempo para que me quedara bonito y se dieran cuenta que no hacia nada malo, pero me insultaron otra vez y me rompieron los dibujos.”, le dijo Diego a su mamá. Al describir esa escena ella llora. “En ese momento en el que lo maltrataron mi hijo tuvo una crisis”, cuenta.

Después, Diego le contó a su mamá que lo metieron a un cuarto que describió como oscuro y con olor a orines. Pensaba que el cuarto donde tenían a otros inadmitidos era una celda, pues a eso la asemejan los miles de colombianos que han pasado por allí y que denuncian recibir tratos inhumanos.