De barequera a reina del oro ilegal: la historia de Mara Gordillo

Mara Cecilia Gordillo Bedón empezó desde cero. Como muchos pequeños comerciantes de oro, inició extrayendo las cantidades que pudo batear y acarrear ella misma desde el río Sambingo, hasta que le alcanzó para poner un primer local comercial en la ciudad de Cali.

Entonces, se dedicó a comprar el producto de otros vendedores a través de la comercializadora Emmanuel Gold S.A.S. y a servir de intermedio para el envío de ese recurso a otras partes del país e incluso del extranjero.

Pronto, el aumento de su patrimonio fue tal que abrió una segunda sucursal en el centro comercial Unicentro de la capital vallecaucana y comenzó a desplazarse por la ciudad en camionetas blindadas, portando joyas ostentosas.

Su repentina prosperidad atrajo la atención de las autoridades interesadas en el comercio ilegal del oro así como en la sedimentación del mismo río Sambingo, el cual perdió parte de su curso bajo el impulso-entre otros factores- de la minería ilegal.

Esa afectación ambiental llevó a la Dirección Nacional de Carabineros y Seguridad Rural y al CTI a capturar a 14 personas en abril de 2016, entre socios y administradores menores de la presunta organización delictiva que no pudieron desmantelar completamente en ese momento.

A la postre, la investigación siguió su curso, hasta que los agentes de gobierno empezaron a percatarse de que las cuentas de la empresa no cuadraban. No solamente registraba menores cantidades de las que realmente le ingresaban, sino que falsificaba junto con sus hijos los certificados que tenía que presentar ante la Dian y cambiaba regularmente de razón social.

De esa forma logró evadir los controles fiscales durante un tiempo y enviar posteriormente a través de correos humanos-generalmente mujeres- más de 3 toneladas de oro "legalizado" a empresas fundidoras localizadas en Cali y en y Miami, Estados Unidos, en menos de dos años.

Apenas tres días antes del arresto, la compañía Emmanuel Gold S.A.S cambió de nombre a Kamal Logic Solution, de acuerdo con los investigadores del caso, presuntamente para evadir las investigaciones en su contra, pero no fue suficiente.

El 17 de agosto, las autoridades capturaron a Mara Cecilia Gordillo a la que bautizaron la reina del oro, a sus dos hijos Alejandro Amaya Gordillo y María Angélica Amaya Gordillo, representantes legales de la empresa Emmanuel Gold, así como a la contadora Yamileth Claros Osorio y la asesora Luz Yamileth Galindez.

La carga de delitos por los que serán imputados es larga y atestigua de la voluntad con la que se combaten tanto las afectaciones ambientales como las evasiones fiscales. Además de concierto para delinquir agravado, contaminación y daño ambiental, contaminación ambiental por explotación de yacimiento minero o hidrocarburo, la fiscalía tratará de imputarles los cargos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito de particulares, omisión de agente retenedor y falsedad material en documento público. Además de que les fueron incautados bienes por un valor de más de 1.500 millones de pesos.

Con su captura y el desmantelamiento de la presunta empresa fachada, se supo cual era el verdadero destino del oro extraído ilegalmente de los ríos del Cauca, Nariño, Chocó y Valle del Cauca y de qué manera se "legalizaba" para ser comercializado formalmente una vez fundido, dentro y fuera del país.