Capturan a Samy Spath, el hombre de la tula, llegando desde España

Hace diez días, un juez de Montería encontró responsable a Samy Spath Storino, el conocido hombre de la tula, de los delitos de concierto para delinquir y cohecho. Desde Italia, donde se refugió en los últimos meses, habría continuado su colaboración con la Fiscalía para desarticular el cartel de la corrupción de Montería, que habría malversado recursos por casi 50.000 millones de pesos. 

Las autoridades estaban prestas para detenerlo en la ciudad de Bogotá, una vez aterrizara en un vuelo procedente de España. Sin embargo, no fue posible dadas las condiciones climatológicas que le impidieron llegar a la capital, razón por la cual la detención se terminó llevando a cabo en Medellín. 

El juzgado lo sentenció a 27 meses de prisión, que deberán ser pagados en la cárcel Las Mercedes de Montería. Como amigo personal del exgobernador Alejandro Lyons, Spath es considerado una ficha valiosa en la investigación. A través suyo se hizo la entrega de millones de pesos de corrupción a funcionarios y contratistas de la administración de Córdoba.

El juez le dio diez días para presentarse en Colombia y así lo hizo. La sentencia no fue apelada por su abogado defensor. 

El nombre de Sami Spath Storino salió a la luz en las primeras confesiones que hizo el exgobernador de Córdoba Alejandro Lyons desde Miami. Este aseguró que Spath fue testigo de un jugoso desembolso al senador Musa Besaile, así como de movimientos de fajos de billetes en torno al llamado cartel de la hemofilia, que inventaba pacientes para desfalcar al Estado.

Después de meses de investigación alrededor de esta declaración, la Fiscalía tomó la determinación de llamar a imputación de cargos a Spath por los delitos de cohecho y concierto para delinquir. Fue presentado ante un funcionario judicial como el enlace con los contratistas que, supuestamente, se beneficiaron con el desvío de los dineros públicos de la gobernación.

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Durante las audiencias a las que asistió antes de refugiarse en Italia, Spath aseguró que no se lucró de esos recursos de las regalías pero admitió que había ayudado recogiendo plata de contratistas que luego fue a parar a los bolsillos de Lyons.

“Sami Spath no solo entregó ese dinero, sino que me ayudó a organizarlo en un bolso o tula pequeña y presenció además cuando el senador llegó, se reunió conmigo en la sala de mi apartamento y se retiró con el dinero que previamente habíamos puesto en la tula. En ese momento el senador ya fue muy explícito conmigo (…) me dijo que el dinero tenía como destino los magistrados Leonidas Bustos y Francisco Ricaurte”.

El anterior es un aparte de la confesión rendida por Lyons, quien suscribió un acuerdo de colaboración con la Justicia de Colombia y permanece en Miami como cooperante de la DEA.

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