ORDEN PÚBLICO
En video: La captura de uno de los mayores lavadores de dinero del narcotráfico, según EE.UU
Piedrahita ha sido señalado de blanquear dinero para el Cártel de Cali, el del Norte del Valle, la Oficina de Envigado y las FARC a través de una red de 11 grandes empresas nacionales y de Panamá. Ahora tendrá que enfrentar cargos en EUA.
El operativo en contra del reconocido ganadero José Bayron Piedrahita Ceballos pareció sacado de la serie de película de Rápido & Furioso. Los hombres del CTI que grabaron la escena con una cámara Gopro llegaron a su finca La Contadora en el municipio de Caucasia a toda velocidad, y en seguida desplegaron armas largas mientras gritaban: “¡Fiscalía!”, hasta que se dieron cuenta de que el hombre se rendía sin oponer resistencia, junto con sus acompañantes.
Entonces le notificaron los cargos que pesaban en su contra y le indicaron que había sido requerido en Estados Unidos a través de una circula roja de Interpol. Con una calma impresionante, Piedrahita escuchó los cargos y se sometió a que las autoridades buscarán ahora su extradición hacia norteamérica.
Desde hace mucho tiempo, José Bayron Piedrahita ha sido señalado por el departamento del tesoro estadounidense de ser uno de los grandes blanqueadores de dinero de los cárteles colombianos. A través de los años, su nombre fue asociado al Cártel de Cali, al del Norte del Valle y más recientemente al de la Oficina de Envigado, por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
El año pasado fue incluso incluido en la lista Clinton como uno de los ‘jefes del crimen’ de un supuesta red que incluyó a sus asociados -entre los que se cuentan su esposa, Claudia Jannet Castillo Londoño y sus dos hijos- así como a 11 reconocidas empresas nacionales y panameñas. La cadena Frigoríficos del Cauca, primera en esa lista, también fue parte de un proceso de extinción de dominio por haber presuntamente servido de testaferra a las FARC.
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En ese momento también se supo que existían investigaciones abiertas en contra del empresario en una corte de Virginia desde 1997, por un caso relacionado con lavado de dinero para el Cártel de Cali y que el hombre inició la construcción de su emporio a partir de 1990.
Su inclusión en la lista Clinton generó un rifirrafe en Colombia cuando la Fiscalía trató de extinguir sus bienes -entre los que se cuentan lujosas mansiones con cascadas y hasta ponies- y tuvo que frenar la operación debido a la decisión de un juez que consideró que hubo ilegalidades en la investigación. También se habló de una intromisión del gobierno norteamericano en el proceso.
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En esta ocasión, sin embargo, Piedrahita es requerido por una investigación que lo relaciona con operaciones de lavado de dinero para la Oficina de Envigado -derivadas del tráfico que cocaína- que también alcanzó al inversionista Mateo Corvo Dolcet y a cinco otras personas que fueron capturadas esta mañana en Argentina.
Hace tan sólo unas semanas, el empresario que es socio de Otto Bula en varios negocios desató la furia de la justicia norteamericana cuando se vio involucrado en un caso de corrupción en el que presuntamente entregó 20.000 dólares en efectivo al agente especial Christopher V. Ciccione de la agencia seguridad nacional (HSI) para que cese una investigación en su contra.
El departamento de Justicia se dio cuenta de que Piedrahita aparentemente recompensó a Ciccione con una invitación a Colombia en la que le ofreció licores y mujeres como agradecimiento por archivar su caso y tratar de ofrecerle una libertad condicional en ese país.
Ahora, parece que se acabó la aventura del antiguo capitán del Ejército al que Estados Unidos acusa de haber sido uno de los mayores empresarios dedicados al lavado de dinero en la historia de Colombia.
Con su testimonio podrán aclararse numerosos casos de blanqueo de fondo en Colombia que ponen a temblar a parte de la clase empresarial del Bajo Cauca y de Antioquia en donde mantiene fuertes lazos económicos y laborales.