Capturan a alias Popeye por extorsión en Medellín

Cuando el exsicario de Pablo Escobar, Jhon Jairo Velásquez Vásquez, alias Popeye, se presentó ante la Fiscalía de Medellín para dar explicaciones por las amenazas que aparecen en su cuenta de Twitter en contra de seguidores de Gustavo Petro, lo estaban esperando para hacer efectiva una orden de captura en su contra. 

La Fiscalía delegada contra el crimen organizado tenía avanzado un proceso contra Popeye por el delito de extorsión. Por ello, aprovecharon las explicaciones que el exsicario se ofreció a dar para dejarlo detenido. Ahora, será presentado ante un juez de Medellín para que responda por ambas cosas: extorsión y por los delitos relacionados a las amenazas de sus redes sociales. En este último caso, el senador Iván Cepeda lo denunció por hostigamiento por motivos de raza, religión, ideología, además de injuria, calumnia e instigación para delinquir. 

Desde comienzo de semana comenzaron a dar vueltas en las redes sociales los mensajes publicados en la cuenta de Twitter @Popeye-leyenda, en los que se lanza insultos e incluso amenazas a los seguidores del candidato a la presidencia Gustavo Petro. El perfil -que tiene más de 72.000 seguidores- está encabezado por un video llamado La verdad de Gustavo Petro y el M-19, protagonizado por quien fue el sicario de Pablo Escobar.

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"Maldit@s Petristas denuncien mi tw (Twitter). Los odio. Si no me puedo expresar...mi Fusil hablará por mi. Cuando empiece el dolor y el llanto. No lloren que no abra compasión. Amo Colombia soy un guerrero Santo", indicaba uno de los mensajes del exjefe de sicarios de Escobar.

Popeye pasó 23 años de prisión por varios delitos, entre ellos el asesinato de Luis Carlos Galán, la bomba del DAS, la bomba al avión de Avianca. Ahora, en libertad, desde las redes sociales ha interferido en la campaña política y publica opiniones en contra del candidato de la Colombia Humana y sus seguidores. 

Según fuentes de la Fiscalía, a comienzos de este año, dos familias lo denunciaron porque estaba intimidándolos para que pagaran una deuda de miles de millones. Los denunciantes, hoy testigos, le contaron a la Fiscalía que Velásquez Vásquez trabajaba en asocio con otras personas para cobrar dichas deudas. A Popeye le pagaban un porcentaje del dinero que consiguiera cobrar, las personas quedaban llenas de pánico cuando Popeye personalmente o por vía telefónica los contactaba para que se pusieran al día.

Lo que dicen en la Fiscalía es que estas deudas eran al parecer legales, sin embargo, no usaron mecanismos como iniciar un cobro jurídico o poner el caso en manos de abogados. Prefirieron acudir a llamar a Popeye, un hombre cuya su sola presencia genera terror.