NACIÓN
Cárcel para siete funcionarios del Inpec por extorsionar y traficar desde cárcel de Valledupar
Según las investigaciones de la Fiscalía, los procesados estarían cometiendo estos delitos en la Penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar.
Un juez de control de garantías de la Fiscalía General de la Nación impuso medida de aseguramiento en centro de reclusión en contra de siete funcionarios que estaban adscritos al Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec), como presuntos responsables de concierto para delinquir agravado.
De acuerdo con la investigación, los implicados habrían cometido delitos relacionados con extorsión y comercialización de sustancias estupefacientes desde el interior de la Penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar (Cesar), precisa un comunicado de prensa del ente acusador.
“Labores de seguimiento e interceptaciones telefónicas permitieron evidenciar que, al parecer, los imputados desarrollaban actividades ilícitas con ayuda de personas que están por fuera del centro carcelario”, detalla el reporte de la Fiscalía.
El seguimiento que hizo esta entidad permitió recolectar evidencias de que los uniformados del Inpec presuntamente desarrollaban actividades logísticas para dirigir entregas de panfletos para extorsionar, tomar fotografías de los establecimientos comerciales y ordenar el cobro de dineros que eran pagados a través de empresas de mensajería, con cifras superiores a los $800 millones de pesos.
Lo más leído
Durante las audiencias, el fiscal del caso se refirió a la forma como estos funcionarios investigados al parecer ingresaban al penal teléfonos celulares y cobraban tarifas para permitir la entrada de comidas, licor y otros elementos a los privados de libertad.
La Fiscalía reveló que estos funcionarios utilizaban drones para el ingreso de elementos irregulares. “Los procesados estarían cobrando $35.000.000, dinero que habría sido repartido entre los siete capturados”, indica el ente acusador.
Durante varios allanamientos realizados por servidores del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI), en las viviendas de los implicados, con el apoyo del Ejército Nacional y la Policía Nacional de Valledupar (Cesar) y Florencia (Caquetá), fueron incautados nueve celulares de alta gama, sim cards, memorias USB, libretas de apuntes, una pistola traumática, bolsas plásticas camufladas como suero, que contenían whisky, y dinero en efectivo por valor de $6.352.000. Además, fue hallada una carta en la que un recluso, conocido como alias Culebro, solicitaba a un guardia le permitiera el ingreso de celulares para lo cual ofrecía la suma de $14.000.000.
La medida en establecimiento carcelario fue para los funcionarios Henry Rendón Henao Martínez, Henry Fernando Novoa Martínez, Fabián Ricardo Cangrejo Castillo, Édgar Alejandro Martínez Arias, Cristian David Correa Osorio, Andrey Alejandro Durán Sánchez y Jaime Alonso Herrera Flórez.
“La noche de terror” en la cárcel La Modelo
El 20 de octubre, la Fiscalía logró establecer que hubo tres momentos clave durante el motín que se dio en la cárcel La Modelo de Bogotá y que dejó 23 personas muertas y más de 80 heridos, el 21 de marzo de 2020. En esos escenarios, aseguraron que los funcionarios del Inpec capturados incurrieron en actos de tortura en contra de varias personas privadas de la libertad. Al parecer, de acuerdo con el fiscal del caso, estos funcionarios infligieron castigos luego de retomar el control de la cárcel.
“De esta investigación se han detectado tres momentos principales de los cuales se generaron esas agresiones y abusos. El primero es durante el proceso de retoma por parte del cuerpo de custodia y vigilancia del Inpec mediante el empleo de golpes y desnudez forzada a los algunos de los privados de la libertad”, señaló el fiscal del caso en ese momento.
El segundo momento, según la Fiscalía, ocurrió cuando se realizaron varios traslados a centros médicos a cargo del Inpec, justamente por quienes resultaron capturados y señalados de infligir castigos físicos y psicológicos en contra de las personas privadas de la libertad. El tercer escenario ocurrió en las llamadas celdas de aislamiento y en la misma cárcel La Modelo, cuando cometieron las torturas y les negaron atención médica a los reclusos.