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Carlos Amaya y Juan Manuel Galán, protagonizan una nueva discusión en la Coalición Centro Esperanza.
Carlos Amaya y Juan Manuel Galán, protagonizan una nueva discusión en la Coalición Centro Esperanza. | Foto: Semana

POLÍTICA

Carlos Amaya arremete contra hermanos Galán | ¿Nueva pelea en la Centro Esperanza?

En un nuevo capítulo de las divisiones en la Coalición Centro Esperanza, el aspirante Carlos Amaya respondió a las críticas que le han hecho por supuesto clientelismo.

15 de febrero de 2022

Por esa razón, Juan Manuel Galán, candidato del Nuevo Liberalismo y quien se medirá en la consulta de la Coalición Centro Esperanza con Amaya, pidió claridad de lo revelado.

“Si queremos mantenernos fuertes, en la Coalición Centro Esperanza debemos despejar dudas, aclarar temas y hablar siempre con la verdad. Clave que Carlos Amaya y Claudia López clarifiquen esta información”, afirmó el candidato.

Ese trino de Galán molestó a Amaya y nuevamente se abre una grieta en la Coalición Centro Esperanza, a pocas semanas de las consultas interpartidistas en el país. “Esta es una situación bastante incómoda. Yo pongo la cara, pero también ustedes deberían entender que sobre esta situación ustedes tendrían mucho más que explicar”, respondió Amaya a Juan Manuel Galán.

En un video, el aspirante presidencial señaló que él no tiene por qué esconderse y que responde a todas las dudas que haya sobre la denuncia ciudadana, pero pidió a los hermanos Galán aclarar sus vínculos laborales con el Estado.

“Ustedes tienen derecho a que su familia trabajara en cinco gobiernos nacionales sin ningún problema, porque son Galán, pero ¿la señora Ana María Gómez que tiene una gran hoja de vida no tiene derecho, o la señora luz Mary por ser Cárdenas, o el señor Aranguren por ser Aranguren y no ser de una familia reconocida, entonces son clientelistas?”, se quejó Amaya.

Amaya agregó que “¿o porque yo soy hijo de campesinos, que he hecho política desde la provincia, con mucho esfuerzo, ganándome todo a pulso, nada me lo han regalado, entonces soy clientelista porque hay buenos funcionarios en el gobierno distrital?”.

Rodríguez reclama que desde la Alianza Verde siempre se ha hecho política, apelando la lucha contra el clientelismo y la corrupción, pero que estos hechos evidenciarían lo contrario.

Uno de los directos implicados es el jefe de gabinete de Bogotá, Luis Ernesto Gómez, mano derecha de la alcaldesa en su administración. La denuncia radica en que la hermana de Gómez (Ana María Gómez) es directora de la Unidad Administrativa de Relaciones Nacionales e Internacionales en la Casa de Boyacá a cargo de la Gobernación de ese departamento.

Asimismo, Rodríguez evidencia que Amaya fue contratado en la Alcaldía de Bogotá en 2020 por 90 millones y por prestación de servicios durante 5 meses y 10 días para “prestar sus servicios profesionales especializados al despacho de la alcaldesa mayor de Bogotá, para el seguimiento de los proyectos estratégicos orientados a la integración regional del Distrito Capital”.

Otro de los supuestos favores retribuidos entre ambos es el nombramiento de Germán Aranguren, quien fue director jurídico de la Gobernación de Boyacá y ahora ocupa el mismo cargo en la Secretaría de Gobierno de Bogotá.

Algo similar sucedió con Suzanne Marie Valeri D’anglejan Chatillon, quien fungió como asesora de Cultura y Turismo en Boyacá y ahora es asesora de la Secretaría de Gobierno de Bogotá.

Rodríguez cuestiona el papel de otras personas cercanas a la administración local. Por ejemplo, el del analista Ariel Ávila, quien, según él, ha guardado silencio ante estos hechos, cuando Ávila ha cuestionado este tipo de prácticas en otros sectores.

Ariel Ávila
Ariel Ávila - Retratos | Foto: JUAN CARLOS SIERRA PARDO

Además, reclama que puede deberse al programa que presenta en Canal Capital, Mesa Capital. Actualmente Ávila aspira al Senado por la Alianza Verde. Además, Rodríguez evidencia que su esposa, Magda Paola Núñez, trabajó en la Gobernación de Boyacá.

Aunque en un principio Amaya fue prudente, su paciencia se agotó. A juicio del aspirante presidencial, Galán debió preguntarle primero antes de retomar “una información de una cuenta falsa” que busca desprestigiarlo.