Carlos Mattos ofreció “mil disculpas” a Colombia y pidió ser tratado como un “reo en condiciones dignas”

El próximo 7 de junio se conocerá la segunda condena en contra del empresario colombo-español Carlos Mattos Barrero. Esto después que este jueves, 21 de abril, reconociera de manera libre y voluntaria su responsabilidad en el pago de un millonario soborno a la jueza 16 civil municipal de Bogotá que dejó en firme la medida cautelar que lo benefició y le siguió permitiendo comercializar en Colombia vehículos de la marca coreana Hyundai.

Mattos reconoció, por medio de su abogado, el delito de cohecho por dar u ofrecer agravado en el proceso que se le adelantó por haberle enviado 100 millones de pesos en efectivo a la jueza Ligia del Carmen Hernández como muestra de agradecimiento por haber dejado en firme el fallo emitido por el juez sexto civil municipal de Bogotá, Reynaldo Huertas.

El empresario, quien se encuentra actualmente privado de su liberad en la cárcel de máxima seguridad de Cómbita (Boyacá), ofreció excusas al país por los daños causados con su plan para torcer a la administración de justicia para conseguir beneficios personales y económicos.

“Colombia, mil disculpas por los daños causados”, aseguró el expresidente de Hyundai en Colombia. En su corta intervención pidió que se tenga en cuenta su estado de salud para que pueda cumplir su condena en un “sitio de reclusión más acorde” y le permitan “acceder a los tratamientos médicos por mis quebrantos físicos que están ampliamente documentados (…) que se me permita ser un reo en condiciones dignas”.

Mattos, igualmente, manifestó que su aceptación de cargos fue de manera libre y voluntaria, descartando de plano cualquier posibilidad de que haya sido inducido al error. De esta forma el empresario aceptó su responsabilidad en los dos procesos penales que se le adelantaron por el denominado caso Hyundai.

¿Cuánto podría pagar de cárcel?

En la audiencia celebrada este jueves, la Fiscalía General reconoció que por haber aceptado los cargos y haber reparado a las víctimas (Rama Judicial) el empresario podría recibir una serie de beneficios judiciales, hecho por el cual pidió que la pena a imponer sea de 63 meses de prisión (cinco años y dos meses).

Mientras tanto, la defensa de Mattos pidió una condena de 32 meses de prisión (dos años y medio). Así como su traslado a la cárcel de Barranquilla, que es la ciudad donde el empresario tiene arraigo desde hace varias décadas. De no hacerse este traslado, pide que sea llevado a la reclusión militar en la capital del Atlántico “para que no digan que hay sindicatos o corrupción” que lo beneficien.

El abogado pidió que se tuvieran en cuenta factores como la edad del procesado y su voluntad de aceptar cargos y reparar a las víctimas. Esto, considera, demuestra que no representa ninguna peligrosidad.

El otro proceso

Este viernes 22 de abril se conocerá la primera condena contra Mattos por haber pagado millonarios sobornos a funcionarios y empleados de la Rama Judicial para que alteraran el sistema de repartos de los juzgados civiles de Bogotá y direccionaran la tutela al despacho del juez Reynaldo Huertas, quien ya había recibido un soborno de Matos para emitir en tiempo récord medidas cautelares.