Caso Ana María Castro: ¿qué viene en el proceso y por qué se aplazó?

Los capturados por el presunto feminicidio de Ana María Castro, la joven que fue lanzada, según la Fiscalía, de un vehículo en movimiento en la noche del 5 de marzo de 2020 en Bogotá, ya completan seis meses privados de la libertad y el proceso se encuentra en las audiencias preparatorias al juicio. La defensa de los imputados pidió aplazar las audiencias hasta conseguir una prueba que consideran fundamental para el proceso.

Fuentes del caso y de la representación de víctimas, de la familia de Ana María Castro, hablan de dilaciones, y por eso advierten que es necesario pisar el acelerador y evitar un vencimiento de términos que deje en libertad a los dos capturados en el proceso: Paul Naranjo y Julián Ortegón.

El relato de la Fiscalía no coincide con las declaraciones de quienes estuvieron en el lugar y la hora de los hechos, incluso la persona que luego se convirtió en testigo del ente acusador. Todos aseguraron en sus declaraciones que la noche del 4, la madrugada del 5 de marzo de 2020, estuvieron en un establecimiento nocturno del norte de Bogotá, pero cuando Paul Naranjo y Julián Ortegón, los únicos capturados, decidieron irse para su casa le ofrecieron Ana María la posibilidad de llevarla y ella aceptó, con la condición de llevar también a quien la acompañaba en ese momento, Mateo Reyes.

Esta semana estaba programada la audiencia preparatoria al juicio en contra de Naranjo y Ortegón, pero la defensa solicitó un aplazamiento tras considerar que es necesario ubicar un material probatorio para exponer y sumar como antesala al juicio que se espera adelantar lo antes posible con el fin de evitar el vencimiento de términos.

La solicitud de la defensa no fue muy bien recibida por las otras partes dentro del proceso, como la representación de víctimas y la propia Fiscalía, tras considerar que el momento no es oportuno y dificulta el normal desarrollo de la acusación que hizo el fiscal del caso por el delito de feminicidio.

Con el aplazamiento, el juzgado deberá fijar una nueva fecha para retomar la audiencia preparatoria donde la Fiscalía y la defensa expondrán las cartas o pruebas que se usarán más adelante en el juicio contra Naranjo y Ortegón. La defensa de los imputados ha insistido que mantendrá su decisión de declararse inocentes al considerar que los hechos investigados por la Fiscalía no corresponden propiamente a un feminicidio, pues las circunstancias de modo, tiempo y lugar están más cerca de un accidente de tránsito.

Los abogados de Naranjo y Ortegón esperan llevar a juicio a un testigo que no fue escuchado por la Fiscalía, pero que fue justamente el primero en llegar a la escena del crimen, incluso antes de quien después terminó por convertirse en la principal prueba ente acusador.

Se trata de Alexánder Forero, ingeniero biomédico, quien aseguró ser la primera persona que llegó al lugar de los hechos, al punto donde supuestamente Ana María Castro fue lanzada de un vehículo en movimiento. Sin embargo, a este testigo la Fiscalía no lo interrogó, por lo menos no de manera formal.

“Yo fui el primero en llegar, no había más carros. Se me atravesó un hombre, Mateo Reyes, pero me asusté, pensé que me iban a robar, seguí derecho y luego vi a la mujer en el piso, supe que pasó algo, entonces llamé al 123 y me devolví; en eso pasaron más de tres minutos y regresé”, señaló el testigo.

En el escrito de acusación en contra de los dos implicados, la Fiscalía relató que para este juicio presentarán 50 testigos entre investigadores, policías y particulares que conocieron en detalle o estuvieron presentes en lugar y la hora de los hechos.