Nación
Caso Hyundai: abogado afirma ser víctima de la persecución del exfiscal Néstor Humberto Martínez
Alex Vernot fue procesado porque supuestamente ofreció dos millones de dólares a un abogado del empresario Carlos Mattos.
Mientras se define la forma y el momento en que llegará a Colombia el empresario Carlos Mattos, procesado por el llamado caso Hyundai, la docena de personas que terminaron enredadas en esta investigación, algunos sirviendo como testigos, los que aceptaron la responsabilidad y otros, como el abogado Alex Vernot, rechazando los cargos de la Fiscalía.
Justamente cuando se pretendía avanzar en el juicio contra Alex Vernot, acusado de ofrecer dos millones de dólares a un abogado que ahora es testigo de la Fiscalía, el testigo que no estaba listo para declarar en el inicio de este juicio. Por eso, el abogado y acusado en este caso, anticipa que fue víctima de la persecución judicial del exfiscal Néstor Humberto Martínez.
Son ocho los testigos que tiene la Fiscalía (la mayoría investigadores del CTI) contra el abogado que estuvo casi dos años privado de la libertad y ahora vive en Francia. Sin embargo, un testigo, al parecer muy importante, no lo encontró el fiscal para el juicio. Se trataría de una investigadora del CTI quien estuvo en varias etapas del proceso, pero que ahora está fuera de la Fiscalía.
Por esas circunstancias, el fiscal solicitó el aplazamiento del juicio, mientras también le exigía respeto al abogado de Vernot, que en su intervención aseguró como un “fiscal con poca inteligencia podrían darse cuenta de los errores en el proceso”.
La Procuraduría no se opuso a aplazar el juicio, tampoco la defensa, aunque sí hizo algunas recomendaciones para avanzar con mayor celeridad en esta investigación que lleva más de tres años por estrados judiciales.
“Para que traiga entonces sus testigos pero el argumento de que esa es estrategia de la Fiscalía es errónea, una cosa es la estrategia con la que se plantean las pruebas y otra cosa son las pautas de la procesal que son los que se rigen y están bajo su rectoría señor juez, no tenemos oposición para ello, como no solemos tenerla cuando encontramos dificultades en la otra parte, solo esperamos que esa misma actitud sea practicada”, señaló la defensa de Vernot.
La juez tuvo que intervenir para exigir prudencia en las manifestaciones y que “guarden decoró con la naturaleza en la audiencia que nos ocupa y según la posición que ocupamos cada uno y el rol que desempeña”, la juez insistió que tras no encontrar oposición para la solicitud de aplazamiento, lo haría de esa forma y fijó para el mes de mayo la diligencia, eso sí con una advertencia para la Fiscalía.
“Llamar la atención de la Fiscalía por parte del despacho que debe cumplir con esa tarea y que, ya que se solicita en la concentración, al momento de que depongan sus testigos hacerlos también de manera efectiva, la ubicación de esos testigos para que se realicen lo que solicitan: que se escuchen en una sola sesión y no vulnerar ese derecho a la concentración del juicio oral”, dijo la juez.
En el marco de esta trama judicial, el abogado Vernot fue objeto de una decisión de Naciones Unidas, que dictaminó su detención como arbitraria, ordenando su libertad inmediata, una indemnización, y la difusión en los medios de comunicación de esta circunstancia anómala. Sin embargo, esa decisión no fue acogida por el Gobierno Nacional. Vernot finalmente salió en libertad pero por vencimiento de términos.
La Fiscalía tendrá que llevar entonces los ocho testigos que aseguró tiene para este proceso, la defensa por su parte advirtió que a un testigo, Luis David Durán, le ofrecieron beneficios judiciales para declarar en contra de su cliente, será un testigo que no tendrá sencillo entregar su versión pues la defensa de Vernot, aseguró, tiene las pruebas para desmoronar las versiones en su contra.
El caso Hyundai que tiene a más de una docena de personas privadas de la libertad incluso con condenas, nació de un acto de corrupción que permeó el sistema de reparto de los juzgados civiles en Bogotá, todo con la supuesta intención de conseguir unos fallos judiciales en favor del empresario Carlos Matos, en una disputa comercial que tenía con una empresa extranjera y todo por la comercialización de los vehículos de esa marca en Colombia.