Caso Uribe | “El presidente Uribe nunca me pidió que buscara testigos”, Jaime Lombana ante la Fiscalía

Cuando faltan solo seis días para que se dé la cita ante la juez 28 de Conocimiento de Bogotá, Carmen Helena Ortiz, quien tendrá que decidir si acepta la solicitud de preclusión del proceso contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien es investigado por fraude procesal y soborno a testigos, como lo solicitó la Fiscalía, SEMANA sigue conociendo detalles del expediente. En este caso, se trata de la declaración de uno de los abogados del exmandatario, Jaime Lombana.

El abogado Jaime Lombana señala: “Yo conozco al doctor Álvaro Uribe Vélez hace 20 años, tal vez un poco más, doctor. Yo diría que unos 25 años. Soy abogado y amigo de su familia, especialmente de sus hijos y de él mismo; le tengo un especial respeto y admiración por una relación ininterrumpida de más de 25 años. Tengo nexos, digamos, familiares con la familia del (ex)presidente Uribe. Soy cercano a sus nietos. Tenemos relación de padrinazgo con sus hijos”.

Y agrega: “Le tengo admiración al (ex)presidente Uribe, ejerzo mi derecho al voto. No tengo rol en temas políticos. Creo haber pisado la sede del Centro Democrático en no más de dos ocasiones por citas personales”.

“Desde que estaba en la universidad, amaba el derecho penal, tenía claro cuál iba a ser mi futuro profesional. En consultorio me pasaban los casos penales porque era parte de mi profesión. Aprendí una lección y es que a las cárceles se hace una visita solo cuando sea algo humanitario. Yo no tenía idea que había un señor Monsalve en ese patio, y que Pardo Hasche hablaba con ese señor, menos que Pardo decía mentiras”.

Sobre su supuesta relación con Pardo Hasche dijo que “yo nunca dialogué con él, ni antes ni después a esa visita en su lugar de reclusión. Yo hablaba era con María Mercedes Williamson, los domingos, cuando iba a la casa de Natalia, por nuestra relación”, señala Lombana.

Lombana le dijo a SEMANA en su momento sobre el hallazgo del teléfono de Monsalve, por ejemplo (sic): “Me duele decirlo, pero el magistrado no fue objetivo. La Corte no revisó. Es un recluso que siete teléfonos, siete simcard en la cárcel. Eso es violatorio desde todo punto de vista. Ese material estaba en poder de la Fiscalía y la Corte no lo solicitó. La defensa del expresidente Uribe había pedido esta práctica de pruebas y de otros testimonios como el del Tuso Sierra”.

En esa misma ocasión el abogado Lombana dijo que “no se investigó objetivamente, con transparencia, con respeto al debido proceso. La Fiscalía tiene bases constitucionales para tener un interés real en saber qué hay en esos chats. Álvaro Uribe es un hombre de bien. De lo que se le ha acusado es sin fundamento, es un montaje perverso en contra de él y su entorno”.

Cuenta que María Mercedes Williamson le decía cuándo podía visitarlo a él (Enrique Pardo), pero explica que no fue como abogado. La coordinó con María Mercedes, le cambió las fechas varias veces por temas laborales y le dijo que podía ir un día puntual.

“Recuerdo que duramos bastante tiempo con los trámites e insisto que yo no tenía la menor idea sobre el patio en el que estaba el señor. Pensé que nos íbamos a reunir en una oficina típica de abogados. Llegamos fue a un comedor. Nunca había entrado a ese sitio, como lo pueden verificar, solamente entré ese día a la cárcel La Picota”, le dijo el abogado a la Fiscalía.

Lombana expresa: “Puedo asegurar que solo fue ese día. Probado por el Inpec. El magistrado Reyes me dice a mí que por qué tanta prevención. Pues, doctor, y como le dije al magistrado, tengo 57 años... tengo una experiencia y me di cuenta que el señor tenía un interés mencionándome sobre otra mesa, cuando yo fui por un tema de una hernia y una operación. Pardo no tenía la cabeza en lo que me estaba comentando. Yo entré con María Mercedes, salí luego con ella. Estábamos en una fila de abogados, fue un tiempo bastante largo. Así lo hago como cuando va por ejemplo a Paloquemao, todos tenemos que hacer una fila especialmente a las horas de entrada. En esa fila, doctor, yo puedo decir e insisto bajo la gravedad de juramento. En esas filas, lo usual en el mundo de los abogados, es que todos los colegas hablen en la fila. Más si uno tiene una familiaridad”.

Lombana expresa: “No sé si arrepentirme o no, por una visita a un privado de la libertad, a una persona pariente de mi familia política. La relación se acabó por este incidente. Eso generó una molestia sin que le atribuya a María Mercedes o a Natalia por esa situación. Yo no vuelvo a oírle ningún rollo a nadie que no sea mi cliente”, dice Lombana en la declaración completa conocida por SEMANA.

Posteriormente dice que la reunión fue una trampa. “Una reunión preparada”. Y agrega: “Yo no sabía que iba a ver a Monsalve, al abogado Diego Cadena. Yo no sabía que en ese patio estaba un señor Monsalve, ni sabía que el abogado Diego Cadena iba a ir, lo juro por mi hijo, que es el amor de mi vida. Es una cosa ofensiva, la situación en la que ocurrieron los hechos”.

“No conozco a ningún Caliche, soy defensor suplente en ese proceso del expresidente Uribe. Monsalve le mintió a la Corte. No sé por qué dijo mentiras, pero sí le mintió a la Corte. Ustedes pueden verificar que no es cierto que yo haya entrado antes o después. Dijo que yo era el abogado de Santiago Uribe. No conozco el proceso, es mentira. No he sido abogado de Santiago Uribe”, expresa Lombana.

¿Cómo fue la reunión con Pardo Hasche?

“El sitio era un comedor de La Picota. Era amplio, las mesas separadas entre sí. Como le digo, doctor, en la mesa en la que me siento era una mesa como este escritorio, Pardo se sienta en frente mío. María Mercedes al lado de él. Yo me siento así. Miraba hacia la entrada del comedor, esa es la ubicación espacial que puedo describir. Se veía que él miraba (por eso me incomodó). Me expresa que si yo sabía qué estaba pasando en la mesa de al lado. Le digo que se limite a lo que vine a hablar. Vi que trataba de jalonarme a lo que estaba pasando en esa mesa. Yo me molesté y le dije a María Mercedes, esto no me gusta. Si él quería hablar de su hernia, de la dolencia en su espalda. Fue una conversación de unos 15 a 20 minutos”, cuenta Lombana.

Lombana le reiteró a la Fiscalía lo que califica como “la inocencia del presidente Uribe; él ha sido la víctima que ha sufrido las consecuencias de un entramado perverso, montado. No conocemos gran parte de los detalles de esa trama que montaron contra Álvaro Uribe Vélez”.