Caso Uribe: Fiscalía dice que no hay pruebas de una “operación irregular”

De los seis hechos que el fiscal Gabriel Jaimes construyó como columna de sus intervención en la audiencia de preclusión en favor del expresidente Álvaro Uribe, por la presunta manipulación de testigos, completó tres. Fueron cinco días de jornadas extensas donde el fiscal del caso explicó, demostró y argumentó por qué el proceso contra el exmandatario debe precluir. Ahora se enfocará en los numerales cuatro y cinco de su exposición.

En el tercer hecho se tituló: búsqueda de testimonio de Juan Carlos Sierra, el Tuso Sierra, con intervención de Cadena. Aseguró que las conclusiones de esa actividad investigativa nuevamente dejan por fuera de responsabilidad al expresidente Uribe, en el sentido de ejercer presiones u ofrecimientos para que el Tuso Sierra cambiara su declaración o faltara la verdad para favorecerlo.

El fiscal Jaimes explicó que fue necesario escuchar en declaración al propio Tuso Sierra, en la que aseguró que nunca tuvo relación directa con el expresidente Uribe y lo explica a través de sus vivencias en el departamento de Antioquia, mientras se convirtió en jefe paramilitar. “El señor Ramírez Sierra hace una explicación y señala que nunca fue contactado, buscado o pretendido por el doctor Uribe Vélez o alguien a su nombre para propiciar una declaración de cara a los asuntos legales que el expresidente tiene en Colombia”, explicó la Fiscalía.

Por el contrario, dice el fiscal, el Tuso Sierra explicó que la verdad es muy diferente a los reseñado en algunos medios de comunicación. Advirtió que en 2009 recibió una visita de varios congresistas entre ellos Iván Cepeda, Piedad Córdoba y Rodrigo Lara, donde le preguntaron de forma reiterada sobre la información que tuviera de la vinculación del expresidente Uribe con grupos paramilitares.

“Lo que finalmente menciona y destaca este ciudadano es que en aquel momento se le ofreció para facilitar esa declaración y así propiciar un asilo a la familia de él que estaba aún en Colombia a efectos de garantizar su plena seguridad. Ese es el evento además que relata con claridad el señor Ramírez Sierra”, dijo el fiscal.

La Fiscalía incluso advirtió que la hipótesis de una “operación irregular” para organizar algún montaje en pro de favorecer al expresidente en los procesos que se le adelantaba en Colombia, resultó escasa de argumentos o pruebas y hasta fue excluido por la Corte Suprema de Justicia al momento de resolver la situación jurídica del exmandatario.

“Todo el caudal probatorio recaudado sobre este hecho resulta esclarecedor a plenitud de las observaciones que la Corte Suprema de Justicia que dejó sentada. Sobre el panorama se puede destacar que de ellas resuelta y contundente, piedra angular en esos resultados está la versión del propio Ramírez Sierra, consonante, coincidente no sólo la versión defensiva, sino como lo hemos visto con detenimiento, en la versión de todos y cada uno de los testigos de esos hechos”, señaló el fiscal Jaimes.

Para los investigadores no hay duda de que las versiones entregadas por el Tuso Sierra y los demás testigos en este caso dan fe sobre la realidad de lo ocurrido, incluso el fiscal del caso presentó algunos documentos que demuestran cómo ocurrieron las visitas y de qué manera habló con el abogado Diego Cadena.

“Proveo la siguiente declaración con mi libre albedrío, afirmó también que no he sido inducido por nadie y que recibido ninguna clase de compensación o cambio por esta misma, yo fui extraditado desde Colombia a Estados Unidos en mayo del 2018 después de mi llegada fue encarcelado en Washington D.C pendiente de la resolución de mi caso criminal en el 2009 mientras estaba encarcelado en los Estados Unidos recibí una solicitud de varios oficiales colombianos recibiendo una visita formal fui informado que los oficiales describieron su trabajo como siendo parte del movimiento Nacional de víctimas y las comisiones de paz de la Cámara y Senado colombiano”, señalan los documento enunciados por el fiscal.

En los mismos documentos el Tuso Sierra aseguró que los congresistas que lo visitaron le ofrecieron asilo para su familia en el exterior a cambio de la información que estaban buscando, según su dicho, la presunta vinculación del expresidente con grupos paramilitares en Colombia. Aseguró que hasta funcionarios de la Fiscalía llegaron a su cárcel para pedirle colaboración a cambio de información, entre otros el entonces jefe de asuntos internacionales del ente acusador.