POLÍTICA
César Gaviria accede a reunirse con Iván Duque en el marco de las protestas en Colombia
El presidente lo llamó al teléfono y después de múltiples intentos el exmandatario contestó. El encuentro se realizará en la casa de César Gaviria en cuestión de horas.
La crisis por la que atraviesa el país, la salida del ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla del gabinete presidencial y la sustitución del contenido del proyecto de ley de reforma tributaria, llevaron al expresidente César Gaviria y a Iván Duque a hablar telefónicamente después de muchos intentos desde el Palacio de Nariño y tras una relación política tensa.
La llamada se registró desde la casa presidencial este miércoles en horas de la tarde, después de que Gaviria aceptara contestar su teléfono. SEMANA conoció que el expresidente permitió que Iván Duque lo visite en su apartamento en el norte de Bogotá, un encuentro que podría darse entre hoy jueves y viernes.
Inicialmente, hablarían exclusivamente sobre la crisis por la que atraviesa el país. Y hasta el mes de julio -según le dijo telefónicamente Gaviria- dialogarían sobre la reforma tributaria y sobre dos condiciones claras: si recae específicamente en la clase adinerada de Colombia y si lo recaudado es con destinación específica para atender las consecuencias de la pandemia.
Gaviria telefónicamente le reiteró a Duque lo que le afirmó a la directora de SEMANA, Vicky Dávila, y es que no va al Palacio Presidencial porque no quiere que se desinforme al país y se crea que asiste en busca de burocracia para el liberalismo.
La charla entre Duque y Gaviria se dio después de 14 llamadas telefónicas, para lo cual sirvieron de puente varios funcionarios del gobierno, dirigentes políticos cercanos a los liberales y al uribismo.
Sin embargo, una persona clave fue el expresidente Álvaro Uribe, quien sostiene buenas relaciones con Gaviria, y han hablado en reiteradas oportunidades sobre la crisis del país.
Gaviria, recordemos, se convirtió en un crítico ácido de Duque, e incluso en diálogo con SEMANA habló de la inexperiencia del mandatario y no ahorró adjetivos contra su tributaria, pero después de la llamada telefónica y del encuentro que se daría en cuestión de horas, la relación entre ambas figuras políticas bajaría de tensión.