INVESTIGACIÓN

Comienzan los allanamientos

La fachada de inteligencia militar fue allanada por la Fiscalía ,que indaga qué ocurrió allí.

4 de febrero de 2014
| Foto: SEMANA

La madrugada no fue para nada tranquila. Altos oficiales fueron citados por los altos mandos militares para analizar y tratar de reaccionar sobre las revelaciones de Semana.com según las cuales desde una fachada de una unidad de inteligencia militar se habría interceptado a algunos integrantes del equipo negociador del gobierno en La Habana

La fachada, según lo reveló Semana.com tras una investigación de más de un año, sería el eje de ese tipo de actividades ilegales. Este portal está en capacidad de confirmar que hace más de una semana antes de la publicación, el sitio fue allanado por unidades del CTI de la Fiscalía que tenían información confiable que allí había actividades sospechosas. 

Dentro del lugar los investigadores no encontraron mayor cosa. Sin embargo, tras una pesquisa minuciosa ubicaron una puerta falsa y en su interior más de 10 computadores escondidos. El hallazgo hasta ese momento no era prueba de actividad ilegal. No obstante, uno de los responsables del sitio se identificó con una cédula que resultó  falsa y posteriormente contó que trabajaba para la inteligencia militar. 

Posteriormente los miembros del CTI confirmaron que se trataba de una fachada de inteligencia del Ejército, la cual corresponde a la revelada por Semana.com como una desde donde se habrían interceptado las comunicaciones ilegalmente. Los computadores están siendo analizados por la Fiscalía con el fin de determinar y establecer pruebas que determinen si ocurrieron ilegalidades. 

Se busca establecer si los altos mandos del Ejército estaban al tanto de lo que allí ocurría. Semana.com logró establecer que, tras las revelaciones, los jefes de la polémica fachada negaron a sus superiores la existencia de ella e incluso del allanamiento mismo. Esto no deja de ser inquietante, pues, de ser así, confirmaría la existencia de ruedas sueltas en la institución castrense que estarían realizado actividades de “chuzadas” ilegales.