Bogotá
Claudia López salió de vacaciones y dejó alcalde encargado hasta el 18 de abril
El secretario de Salud, Alejandro Gómez, asumió la funciones de alcalde mayor encargado.
En medio de fuertes polémicas que se han generado en Bogotá por los casos de abuso sexual en contra de 11 pacientes psiquiátricas en el Hospital La Victoria, en San Cristóbal, por parte de un enfermero del centro médico y de los desmanes que han generado los indígenas asentados en el Parque Nacional desde hace más de seis meses, sin que el Distrito garantice el restablecimiento del orden público, la alcaldesa Claudia López decidió tomarse unas vacaciones.
Entrada Semana Santa, Claudia López decidió encargar en las funciones de alcalde encargado al secretario distrital de Salud, Alejandro Gómez. Las vacaciones de Claudia López irán hasta el próximo 18 de abril, día en el que Alejandro Gómez terminará su encargo.
A pesar de que la Secretaría de Salud anunció una investigación al Hospital La Victoria después de conocerse los casos de abuso sexual, la alcaldesa Claudia López salió a vacaciones sin pronunciarse públicamente de lo sucedido.
Una cadena de testimonios en poder de SEMANA acusan a un enfermero de cometer al menos una docena de abusos sexuales contra pacientes psiquiátricas en esta institución de salud de Bogotá.
Según los testimonios, el sujeto las acechaba, esperaba el momento preciso y actuaba cuando las mujeres que serían sus víctimas quedaban bajo los efectos de potentes sedantes. Cuando estaban dormidas y sin ninguna posibilidad de defenderse, se les acercaba a los rostros y, como si se tratara de una sentencia, ponía la boca en los oídos de las pacientes. Les susurraba que se prepararan para un examen médico. Ahí empezaba la tragedia.
Lo sucedido en el Hospital La Victoria salió a luz pública luego de que el enfermero fuera encontrado en la habitación de cuatro pacientes.
La noche del primero de abril parecía transcurrir con normalidad en el pabellón de pacientes psiquiátricos. La unidad cuenta con 58 personas bajo esta condición, quienes requieren de una atención diferente, pues cualquier hecho por fuera de su rutina diaria puede alterar severamente su estado emocional y físico. Hacia la medianoche de ese día, un fuerte alboroto dentro de una de las habitaciones acabó con la tranquilidad de la zona de psiquiatría. La algarabía se sintió en la habitación donde se encontraban cuatro mujeres entre los 30 y 50 años de edad, todas bajo fuerte medicación.
El personal médico encontró a una de ellas fuertemente alterada, la mujer les contó a los funcionarios que alguien había ingresado a la habitación para violarlas. SEMANA reconstruyó, con personal del Distrito y familiares de las presuntas víctimas, lo que pasó esa madrugada y los detalles son escabrosos.
Todo apunta al enfermero Jorge Pérez, quien aparece en las cámaras de seguridad del hospital caminando por el área de salud mental pasada la medianoche, aunque personal de la Secretaría de Salud le confirmó a SEMANA que a esa hora no tenía por qué estar ahí, pues era el momento del descanso que tienen que tomar en el turno. Luego ingresó a la habitación, donde hay seis camas, pero solamente estaban cuatro pacientes, todas mujeres, que minutos antes habían recibido sus medicinas.
La gravedad del asunto tomó relevancia con el pasar de las horas cuando cayeron en cuenta de que el enfermero que se escondía, luego de haber cometido el presunto abuso. Llevaba trabajando en el hospital más de un año y medio y tenía acceso a los 58 pacientes psiquiátricos entre hombres y mujeres, entre los que se encuentra una menor de edad, es decir, que el número de víctimas podría crecer con el paso de los días, como efectivamente sucedió. Se presentó un efecto dominó, otras pacientes perdieron el miedo y lo denunciaron.
Lo que se le cuestiona a la alcaldesa Claudia López es que nadie quiso tomar cartas en el asunto luego de que se conocieran de inmediato versiones sobre la permisividad de la institución con el enfermero, además, que era un secreto a voces lo que ocurría con el funcionario.
De hecho, la cadena de posibles malas prácticas sexuales en esa institución sanitaria no se detienen con este protagonista. Carolina Velandia, enfermera del hospital, denunció a uno de los médicos del centro asistencial por acto sexual violento.
Según contó Velandia, el médico Efraín Fuentes, supuestamente, la tomó a la fuerza, la abrazó, la besó y le tocó los glúteos por debajo de la ropa. Por estos hechos, Fuentes fue llamado a imputación de cargos por la Fiscalía, bajo el radicado 04160, conductas que no fueron aceptadas. El caso sigue su curso normal en la Fiscalía.