Home

Nación

Artículo

claudia lópez Alcaldesa de Bogotá
Claudia López se mostró muy dolida con lo sucedido en Cúcuta | Foto: juan carlos sierra - semana

Nación

Claudia López también se manifestó tras ataque terrorista en el aeropuerto de Cúcuta

La primera mandataria de los bogotanos pidió la solidaridad de todos los colombianos para los ciudadanos de la capital de Norte de Santander.

14 de diciembre de 2021

Este 14 de diciembre Cúcuta vivió un doble ataque terrorista en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional Camilo Daza, el cual dejó un saldo de tres muertos: dos policías, que fallecieron durante la segunda explosión, mientras que el tercero, según el ministro de Defensa, Diego Molano, fue un hombre que intentaba saltar una de las mallas cuando el artefacto explosivo que llevaba le estalló en las manos.

Aunque se conoce poco de los hechos alrededor de estas dos explosiones, el ministro del Interior, Daniel Palacios, aseguró en entrevista con Vicky en Semana que se trataría de un ataque perpetrado por un grupo de las disidencias de las Farc, específicamente los comandados por alias Gentil Duarte o alias Mechas.

Por supuesto, al conocerse la noticia, varias personalidades de la política colombiana se pronunciaron en contra de este escabroso hecho. Una de ellas fue la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien mostró su dolor por lo sucedido por medio de un escrito en su cuenta de Twitter.

“Toda mi solidaridad y afecto con Cúcuta y las víctimas de este acto bárbaro de terrorismo”, escribió López en la red social.

Asimismo, pidió la máxima solidaridad del pueblo colombiano con los compatriotas de Cúcuta, además de ofrecer toda la ayuda posible a las autoridades para que puedan desarrollar su respectivo trabajo.

“Unámonos como Nación, condenemos y rechacemos el terrorismo, apoyemos a las autoridades en su investigación y judicialización, protejamos solidariamente a la policía y todas las víctimas”, añadió.

El llanto de Jullieth Cano

La primera mandataria de los bogotanos redactó su mensaje en Twitter, citando un trino de Noticias Caracol, en el que muestra la reacción de Jullieth Cano, periodista de dicho espacio informativo, quien reportó los sucesos ocurridos en el aeropuerto de Cúcuta.

En su relato, Cano no pudo contener las lágrimas al explicar la forma en que los policías fallecieron después de que los artefactos explosivos detonaron justo cuando los uniformados se disponían a desactivarlos.

“Estamos a solo media cuadra de donde acaba de ocurrir la segunda explosión, dos policías estaban intentando inspeccionar si había explosivos en una caja, lamentablemente detonó cuando se acercaron a la carga explosiva y murieron de forma inmediata”, indicó la periodista que también ejerce su profesión al servicio de Blu Radio.

No obstante, el momento de mayor tensión y dolor para la comunicadora se presentó cuando narró el estado en el que quedaron los cuerpos de los policías, ya que estaban a tan solo pocos metros del lugar en el que ella reportaba la noticia.

“Aquí estoy viendo a los dos policías vueltos pedazos, Dios mío (…), de verdad esta escena es demasiado terrible, Dios mío, esto es increíble, no puedo, no puedo, nos tenemos que retirar”, dijo Cano, antes de culminar la transmisión con la emisora.

Minutos después, ella tuvo que volver a reportar lo ocurrido, esta vez para el noticiero en televisión, aunque el dolor seguía tan vigente como el mostrado cuando hacía su informe para radio. Además, en este segundo reporte, Cano reveló que el camarógrafo que la acompañaba estuvo a punto de morir tras la explosión, pero fue gracias a un ‘milagro divino’ que se pudo salvar.

Según dijo, su compañero de trabajo se dirigía hacia el lugar en el que estaba la caja, con el fin de registrar con su cámara lo que estaba sucediendo. Sin embargo, sin saber el por qué, decidió devolverse instantes previos a que la bomba explotara.

“Cuando ocurrió esta segunda detonación, mi camarógrafo, no sé por qué se devolvió”, fue lo último dicho por Cano antes de que se le quebrara la voz debido a la impresión del momento, ya que fue por cuestión de segundos que su camarógrafo no perdió la vida.