NACIÓN

Comisión de la Verdad pide urgente intervención en Cauca tras recientes masacres

El organismo dijo que la vida y la integridad de las comunidades indígenas, campesinas y afrocolombianas del norte del Cauca están en riesgo inminente.

7 de diciembre de 2020
| Foto: Ilustración SEMANA

Tras la reciente masacre de cuatro personas en el departamento del Cauca, la Comisión de la Verdad pidió una intervención urgente del Estado en esa zona del país.

De acuerdo con cifras de organizaciones de Derechos Humanos, en lo que va corrido del año se han cometido 79 masacres y han sido asesinados 284 Líderes Sociales, entre ellos indígenas.

El sábado en el barrio Los Tanques del municipio de Caloto, Cauca, fue asesinado Hernán Eduardo Pino, quien pertenece a la Guardia Indígena del Resguardo Huellas de esa localidad.

Entre tanto, en la madrugada de este domingo, las autoridades reportaron que en la finca Gualanday de la Vereda San Pedro, zona rural del municipio de Santander de Quilichao, Cauca, fueron asesinados cuatro jóvenes indígenas entre ellos, el líder juvenil Carlos Escué coordinador de jóvenes del Resguardo de Munchique.

Ante estos hechos, la Comisión de la Verdad pido al Gobierno nacional actuar de inmediato para evitar que se sigan presentando estos hechos y “tomar las medidas que conlleven a confrontar y superar los factores de persistencia generadores de la repetición del conflicto en este territorio”.

“La Comisión llama a las autoridades departamentales y nacionales, y a las autoridades responsables de investigar y sancionar, a asumir la responsabilidad de aunar esfuerzos institucionales en acciones efectivas que protejan la vida e integridad de las comunidades, sus líderes y lideresas”, señaló.

Agregó que “el norte del Cauca es una zona en la que confluyen diversos intereses en disputa, que van desde las economías ilegales hasta la tenencia de la tierra. En su amplio proceso de escucha, la Comisión de la Verdad ha recaudado información que evidencia las múltiples alianzas de actores armados, económicos y políticos en la región, que perpetúan las causas del conflicto armado”.

“No es solo un problema de narcotráfico, por eso se requiere la intervención integral del Estado y el fortalecimiento de las iniciativas sociales y comunitarias de protección de la vida, ante la arremetida de los violentos”, señaló.

La Comisión de la Verdad indicó que “en menos de 12 horas, entre la noche del 5 de diciembre y la madrugada del 6, en este territorio se presentaron 4 graves hechos de violencia: una masacre, dos homicidios de comuneros, entre ellos, el hijo de una lideresa indígena, una amenaza individual a coordinador de la Guardia Indígena y una amenaza colectiva a la Asociación de Cabildos del Norte del Cauca ACIN”.

“Los hechos ocurridos se suman a las 12 masacres que se han registrado en este departamento en lo que va corrido del año, así como a los líderes y lideresas sociales, defensores de derechos humanos, y personas en proceso de reincorporación asesinados”, puntualizó el organismo.