Comité del Paro se niega a rechazar los bloqueos, un punto clave para iniciar las negociaciones

En las últimas horas se generó una controversia entre el Comité Nacional del Paro y el Gobierno nacional, quienes, después de reunirse de forma urgente en la noche del jueves, anunciaron que aún no se firmará el documento de preacuerdos que es fundamental para iniciar con las mesas de negociación.

La razón es que la delegación del gobierno de Iván Duque señaló a los miembros del Comité que, para dar un nuevo paso en los diálogos, este debía rechazar enfáticamente los bloqueos viales, que han generado riesgo de desabastecimiento de insumos básicos en diferentes regiones, petición que fue negada en las últimas horas.

“El ejercicio de la protesta, en sí mismo, genera traumatismos en el funcionamiento regular de la sociedad. Se trata de eso, de evidenciar los reclamos, llamar la atención para abrir espacios y posibilidades que las instituciones no han permitido [...] Los cortes temporales e intermitentes de vías, mal llamados bloqueos, hacen parte de las posibilidades legítimas para el ejercicio de las protestas, siempre que no afecten la vida, la salud, la integridad, el medio ambiente y la alimentación de las personas”, señaló el Comité a través de un comunicado.

Esta declaración va en contravía de la exigencia del Gobierno nacional, que según su vocero, Emilio Archila, no es una petición nueva y que se ha planteado a las diferentes centrales desde hace algunas semanas, cuando comenzaron los primeros acercamientos para realizar una negociación.

Ha sido el mismo Gobierno quien en reiteradas ocasiones ha rechazado los bloqueos y ha dicho que estos constituyen una violación a los derechos fundamentales de las personas, en especial de aquellas que no participan del paro nacional, pues se ve afectada su posibilidad de acceder a alimentación, insumos médicos o desplazarse a trabajar.

En el mismo documento, el Comité del Paro dijo que condena “todos los hechos de violencia que afectan la vida, la integridad y la libertad de las personas ocurridos en el marco de las protestas, tanto los que realiza la fuerza pública, como los que realizan los particulares”, así como rechaza “la violencia generada por actores infiltrados ajenos a la protesta social”.

Para los miembros de este grupo que convocó a la primera jornada de paro nacional el pasado 28 de abril y que hoy cumple un mes, se necesita “seriedad y celeridad” en la realización de las negociaciones para lograr la solución a las crisis sociales que son demandadas y reclamadas por los ciudadanos.

Entre tanto, son diferentes los gremios económicos que se han sumado al llamado del Gobierno para que se acaben los bloqueos viales, pues estos han constituido una mayor pérdida económica para las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas en el último mes.

Según las cuentas de Acopi, las pérdidas empresariales ya suman $3 billones de pesos, lo que inevitablemente llevará a una masacre laboral, lo que iría en contravía de los derechos que reclaman los manifestantes en las calles.

Acopi expresa que la parálisis de la actividad productiva de muchas empresas, por causa de los bloqueos, está afectando el abastecimiento de productos, no solo porque a los trabajadores les impiden llegar a los lugares de trabajo, sino porque tampoco dejan pasar insumos necesarios para la fabricación de productos.

Según destacó el gremio de las pequeñas empresas, que son las que concentran más del 80% del tejido empresarial en el país y, por consiguiente, la mayor parte del empleo, “se instalaron las distintas mesas de diálogo con los diferentes actores del paro, entre éstos con el llamado Comité del Paro. Se habla de avances, pero desde las Mipymes consideramos que el principal avance que debe existir es el levantamiento de los bloqueos”.