¿Cómo queda el uribismo en estas elecciones?

Desde el Pacto Histórico han celebrado que supuestamente con la derrota de Federico Gutiérrez se acabó el uribismo.

“Si la tendencia se mantiene: ha muerto el uribismo. Petro y Rodolfo a segunda vuelta. Sé que tenemos que trabajar muy duro para ganar en segunda vuelta, pero mi corazón está feliz. Colombia ha roto las cadenas de la mentira, la corrupción y la violencia”, aseguró Gustavo Bolívar, cuando vio que Petro y Rodolfo Hernández eran los candidatos que se estaban imponiendo.

Petro lo confirmó más tarde en su discurso. “Los partidos políticos aliados al gobierno de Duque, del presidente Duque, su proyecto político ha sido derrotado (...). Se acaba un período, se acaba una era”, comentó Petro.

Sin embargo, esa afirmación no sería tan cierta y, de cara a la segunda vuelta presidencial, estaría alejada de la realidad. Aunque muchos líderes del Centro Democrático apoyaron a Federico Gutiérrez, el partido nunca tomó una decisión oficial y el expresidente Álvaro Uribe se mantuvo al margen de la discusión. Una minoría también apoyó a Rodolfo Hernández y celebraron su victoria. Otros más decidieron sumarse cuando logró el paso a la segunda vuelta y no se quedaron lamentando la derrota de Fico.

“El triunfo de Rodolfo es el triunfo contra el establecimiento. El país necesita cambios, no el suicidio que ofrece Petro, pero sí autoridad, orden y la prosperidad que ofrece un empresario como el ingeniero Rodolfo Hernández”, aseguró la senadora María Fernanda Cabal. Su hijo, Juan José Lafaurie, aseguró que ya está apoyando al ingeniero.

“Felicitamos al ingeniero Rodolfo Hernández por su gran votación. Apoyaremos su propósito de combatir la corrupción y derrotar a Petro”, señaló Paloma Valencia.

El objetivo para ese sector siempre ha sido claro, y es que Gustavo Petro no llegue a la Presidencia, porque consideran que es un riesgo para el país y que podría llevarlo a los mismos destinos de otros gobiernos de izquierda en la región como Venezuela, Cuba, Argentina, Chile, Perú, entre otros.

El uribismo está más vivo que nunca y eso se evidencia en que podría llegar a ser determinante en las decisiones que tome la colectividad y su dirigencia con respecto a qué candidato apoyar. Esto podría terminar inclinando la balanza para sentenciar quién llega a la Casa de Nariño y los votos de Federico Gutiérrez y otros candidatos de derecha se podrían trasladar a donde el ingeniero.

A pesar del evidente apoyo que tendrá el exalcalde de Bucaramanga de otros sectores, deberá analizar su estrategia en detalle, porque cualquier error podría costarle la Presidencia. Una adhesión oficial de partidos tradicionales podría quitarle a Hernández el atractivo de candidato independiente e irreverente en contra del sistema.

Además, le podría dar la razón al petrismo, que ya ha catalogado al ingeniero como “el plan C del uribismo”, o “Duque 3″. Precisamente, para algunos analistas, una de las razones que pudo haberle afectado a Federico Gutiérrez fue que lo asociaron como el “continuismo”, a pesar de la independencia que mantuvo durante su candidatura.

Desde la campaña de Hernández saben que deberán congregar apoyos, pero que no podrán aceptar todas las adhesiones. Ángel Beccassino, el estratega de Hernández, le confirmó a SEMANA que no aceptarán alianzas con partidos políticos tradicionales.

En medio de ese tire y afloje del petrismo con el uribismo, en que el primero quiere encasillar a Rodolfo Hernández en el segundo, ya arrancó una campaña de desprestigio para hacer ver que el ingeniero estaría siendo respaldado por ese sector.

El expresidente Uribe tuvo que desmentir un mensaje en el que supuestamente ya estaba apoyando a Rodolfo Hernández. “Colombianos, no nos dejemos enredar con mentiras y campaña sucia. La defensa de la democracia es nuestra prioridad, por eso nuestra lucha para garantizar las libertades de todos los colombianos está más viva que nunca”, comentó el Centro Democrático ante una fake news que se estaba difundiendo.

Además, ya han sacado fotos de Hernández con Uribe para decir que siempre han sido cercanos y que el ingeniero sería el nuevo candidato del expresidente.

Aunque el uribismo no está oficialmente con Hernández, el ingeniero tiene hacia dónde crecer, congregando líderes de esa corriente; mientras que Petro busca que una parte del centro se le sume con un discurso más moderado, lo que no será una tarea sencilla.

Lo cierto es que el Centro Democrático seguirá adelante y sus decisiones podrían influir electoralmente. En últimas se trata de una fuerza electoral importante en el país que no puede ser ignorada y que necesita de nuevos liderazgos para renovarse. Todo indica que habrá uribismo para rato.