NACIÓN
Con mentiras y difamaciones buscan manchar el nombre de la Policía: minDefensa sobre caso de joven decapitado en Tuluá
El ministro Diego Molano arremetió contra quienes acusaron al Esmad del crimen de Santiago Ochoa.
El ministro de Defensa, Diego Molano, tuvo que salir a desmentir con contundencia los señalamientos que se venían haciendo contra el Esmad, por la presunta responsabilidad en el crimen que aterrorizó el país, según la cual un joven que al parecer pertenecía a la denominada primera línea, que se ubica al frente de las protestas, había sido decapitado en el Valle del Cauca por miembros de este Escuadrón Antidisturbios.
Molano, quien ya había calificado de irresponsables a quienes hicieron dichas aseveraciones, volvió a arremeter contra de quienes lanzaron las afirmaciones responsabilizando a la Policía.
Desde Montería, en Córdoba, donde entregó un balance de la lucha contra el microtráfico, Molano indicó: “Que salgan a decir que el Esmad decapitó a un hombre sin ninguna prueba, sin ninguna información válida, solo por manchar el hombre y el nombre de la Policía Nacional. Aquí uno puede tener diferencias ideológicas, muchas, pero no afectar una institución y el nombre de los policías de Colombia cuando actúan por bien”.
Agregó que “es muy fácil decir mentiras en las redes sociales que cabalgan rápido y vuelan por las redes en segundos, pero a los funcionarios públicos, a la Policía Nacional le toca actuar con la verdad, buscando legitimidad, demostrando con hechos. Así ha actuado nuestra Policía Nacional. Por lo tanto, respaldamos esta institución y condenamos los actos irresponsables que utilizan la mentira y la desinformación para afectar el buen nombre de nuestra Policía Nacional”.
El caso al que hizo referencia el ministro fue al de Santiago Ochoa, un joven que el pasado fin de semana fue asesinado y su cabeza fue encontrada en un sector de Aguaclara, ubicado a las afueras de Tuluá, en el Valle del Cauca.
En redes sociales circularon versiones según las cuales habrían sido hombres del Esmad quienes supuestamente se habían llevado al joven, y posteriormente apareció su cabeza. Un caso que generó consternación a nivel nacional.
Sobre este caso, el ministro de Defensa ya se había pronunciado en Vicky en SEMANA y dijo que “por eso se hacen las investigaciones por la Inspección la Policía, para poder desmentir o validar cualquier hecho (…) Hemos visto muchas noticias falsas”.
Señaló que “la Policía activó un mecanismo de investigación y desarrollará cualquier actividad que necesite la justicia para poder esclarecer este hecho. Todo este tiempo, desde el 28 de abril, tenemos un equipo dedicado a que cualquier queja, a que cualquier denuncia de inmediato sea asumida y manejada directamente por la Inspección de Policía y en caso que corresponda a cualquier otra autoridad judicial, ya sea la Fiscalía o la Procuraduría. De inmediato se presta la colaboración para que se esclarezcan los hechos”.
La versión de la familia
Por su parte, una tía de Ochoa aclaró que su sobrino no era parte de la llamada primera línea de resistencia y que tampoco había sido detenido por la Policía.
“Ni él pertenecía a la primera línea, ni tuvo nada que ver con las marchas o bloqueos, ni fue detenido por la Policía o amenazado nunca. Él simplemente trabajaba en una ferretería y salió a la hora del almuerzo y desapareció”, señaló Martha Ochoa, tía de Santiago.
Por su parte, la Policía en el Valle del Cauca negó que el Esmad estuviera relacionado con un hecho de esta magnitud. Dijo el oficial que la institución trabaja en la identificación y captura de los autores materiales e intelectuales en este hecho. Además, recordó que el Esmad no opera en Tuluá desde hace un mes y ofreció una recompensa de 10 millones de pesos a quien suministre información que conduzca a aclarar este escalofriante crimen.
“Todas las capacidades institucionales se encuentran activadas para lograr la captura de los autores materiales e intelectuales. Para acelerar esta importante investigación ofrecemos también una recompensa de hasta $10 millones”, dijo el coronel Jorge Urquijo, comandante de la Policía en el Valle del Cauca.