La ley por la que luchó Natalia Ponce de León

En marzo del 2014 Natalia Ponce de León, una joven de 27 años, fue brutalmente atacada en la puerta de su edifico, en el norte de Bogotá. Un joven que al parecer estaba obsesionado con ella le roció casi un litro de ácido sulfúrico en su cuerpo y en su cara. Un dramático episodio que, como nunca antes, sensibilizó a todo el país sobre una de las más abominables formas de violencia: los ataques con ácido.

Aquel ataque le causó a Natalia quemaduras de segundo y tercer grados en un tercio del cuerpo, las más severas fueron en la cara, con compromiso en los ojos y en las vías respiratorias. Y cómo no, le significó una nueva vida que, tras más de 20 cirugías, se refugia tras una máscara de policarbonato.

El drama de Natalia es el mismo que padecen en silencio por lo menos otras 526 mujeres, pues según Medicina Legal, ese es el número de víctimas de ácido, desde el 2004. Una cifra que ha puesto a Colombia en un deshonroso primer lugar en la lista de países en los que se ha registrado este tipo de agresiones. Según la página Feminicidio.net, una web de origen español que visibiliza temas con perspectiva de género, en el 2011 Colombia se situó por encima de países como Bangladesh y Pakistán.

A pesar de las circunstancias, Natalia Ponce de León no detuvo su vida, por el contrario, dedicó sus esfuerzos a ayudar a personas como ella y se aventuró a liderar una batalla para que nunca más se repitieran estos ataques. Su drama sensibilizó al representante Carlos Guevara, del MIRA, que presentó un proyecto de ley para crear un nuevo delito, el de ataques con ácido.

Son pocos los agresores que hasta ahora están detenidos y condenados. En primer lugar porque esta conducta se enmarcaba como lesiones personales. Guevara asegura que en la Fiscalía por lo menos 2.000 procesos han sido archivados.

Parece cruel, pero fue el caso de Natalia Ponce de León el que terminó por sensibilizar a la opinión pública y al Congreso. Y este miércoles 25 de noviembre, cuando por mandato de Naciones Unidas se celebra el día mundial de la eliminación de la violencia contra la mujer, el Senado aprobó en último debate la que precisamente ha sido llamada Ley Natalia Ponce de León, la cual pasará a manos del presidente Juan Manuel Santos y entrará en vigencia a partir del momento en el que el mandatario la sancione.

La nueva ley establece penas de prisión de entre 30 y 50 años de cárcel para los que ataquen con ácido, y serán agravadas para los casos en los que las víctimas sean menores de edad o mujeres. También se contemplan sanciones para los que comercialicen este tipo de sustancias a cualquier persona y sin ninguna restricción.

La fórmula diseñada por el Congreso, al elevar las penas, venía siendo reclamada por las numerosas víctimas de los ataques con ácido, como la manera más efectiva de evitar que este tipo de agresiones se vuelva a producir.

Esta es la primera gran batalla que emprendió Natalia Ponce de León tras recuperarse de la agresión que le cambió la vida. Una ley, inspirada en su drama, se puede convertir en la fórmula para que en Colombia no vuelva a haber una persona que sufra su mismo calvario.