El fin de la reelección presidencial

Este miércoles, la Cámara de Representantes sepultó definitivamente de la Constitución el polémico artículo que permitió la reelección presidencial inmediata.

Con una amplia mayoría, los parlamentarios adoptaron la misma decisión que se había producido en los siete debates anteriores en la discusión de la reforma al equilibrio de poderes.

En consecuencia, el período presidencial se mantendrá por cuatro años, pero quien ejerza o haya ejercido la Presidencia no podrá volver a aspirar a ella.

Tanto el Gobierno como la mayoría de los partidos políticos coincidieron en que la decisión del Congreso, en el año 2004, de permitir la reelección presidencial, desequilibró el sistema de pesos y contrapesos democráticos. Sólo el Centro Democrático, partido del expresidente Álvaro Uribe, el primer presidente en reelegirse de forma inmediata, intentó salvar la figura.

Su principal argumento es que los desequilibrios democráticos no provienen de la figura de la reelección sino de la abusiva violación de la Ley de garantías. Explicaron que los gobiernos tienen derecho a continuar su legado, o por lo menos ponerlo en consideración de las urnas.

Los uribistas habían sido derrotados de forma aplastante en los siete debates anteriores. Este miércoles tuvieron el último intento de salvarla, pero fue infructuoso. El representante Édward Rodríguez, quien calificó la eliminación de la reelección como un debate contra la persona de Álvaro Uribe, presentó una propuesta para que se permitiera la reelección pero no inmediata, sino que se pudiera dar cuatro años después de que un presidente hubiese terminado su mandato, tal como estaba habilitado antes de la Constitución del 91. La propuesta fue rechazada por la plenaria.

Rodríguez, tras la derrota, exhibió un video en el que presentó a varios de los protagonistas de esta reforma, caso del ministro Juan Fernando Cristo y la senadora Claudia López (Alianza Verde), donde trató de mostrarlos como políticos incoherentes, pues impulsaron la eliminación de la reelección, pero meses atrás habían defendido esta figura, cuando el presidente Juan Manuel Santos aspiraba a ser reelegido.

Fue una especie de constancia, pues muchos de los que están hoy en el Congreso aprobaron la reelección, aunque hace sólo cuatro años se opusieron a eliminarla cuando el Polo así lo propuso.

Las otras decisiones del Congreso

Igualmente fue aprobada la asignación de una curul en Senado, Cámara de Representantes, asambleas departamentales y concejos municipales para los candidatos que obtengan la segunda mayor votación en las elecciones a Presidencia, Vicepresidencia, gobernaciones y alcaldías, respectivamente. Esto sólo aplicará a partir del año 2018.

Asimismo, la asignación de una curul en la Cámara de Representantes para un raizal de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.

En cuanto al contralor general, este será elegido por el Congreso en pleno de lista de elegibles conformada por convocatoria pública y no podrá ser reelegido.

También se definió que el defensor del Pueblo ejercerá sus funciones de manera autónoma y que el vicepresidente de la República será investigado por la Fiscalía y juzgado por la Corte Suprema, es decir, el mismo régimen de los ministros, el procurador, alcaldes y gobernadores.