NACIÓN
Contraloría pone bajo la lupa presuntas irregularidades denunciadas por SEMANA en la Unidad Nacional de Protección
No hay suficientes vehículos, muchos son viejos y están en mal estado, hay unos cuyo blindaje es falso y funcionarios salen de la entidad para trabajar en las mismas empresas que arriendan los carros.
Por orden directa del Contralor General, Carlos Hernán Rodríguez Becerra, la directora de la Dirección de Información, Análisis y Reacción Inmediata (DIARI), Elvia Otero, se reunió con el director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Augusto Rodríguez, con el fin de iniciar una rápida y rigurosa investigación sobre los hechos denunciados por SEMANA en los que se puso al descubierto una poderosa red de corrupción al interior de esa entidad.
“Estamos haciendo una revisión de lo que viene en camino. Es muy parecido a los que ocurrió en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres. Se han presentado una serie de falencias en el manejo, no solamente desde el punto de vista administrativo, sino también en lo que tiene que ver en la utilización o finalidad de los bienes en materia de contratación”, aseguró Rodríguez Becerra.
El Contralor General reveló que su despacho está revisando y advirtiendo las falencias que se han venido presentando y aseguró que no se pueden endilgar responsabilidades al actual director de la entidad porque este lleva muy poco tiempo en el cargo.
“De manera conjunta con el nuevo director estamos reformulando unos planes que permitan que esos errores no se sigan cometiendo. Frente a los errores que se han cometido vamos a tomar acciones desde el punto de vista de las competencias nuestras” sostuvo Rodríguez.
Sobre los temas de contratación al interior de la UNP, Elvia Otero directora de la DIARI le dijo a SEMANA que esa entidad le solicitó apoyo para verificar lo que ocurrió años atrás y establecer qué es lo que está pasando en este momento.
“Vamos a mirar a través de nuestros modelos de investigación predictivos que maneja la DIARI, que son 28 modelos, entre los que se encuentra las mallas contractuales que nos permiten definir y determinar cuales son los asocios de los contratistas. Ese informe estará listo en enero”, dijo Elvia Otero.
Uno de los casos más escandalosos tiene que ver con el falso blindaje de varios de los carros usados para la protección de personas con alto riesgo en el país.
Una investigación que, según Rodríguez, venía de tiempo atrás, pero que curiosamente se encontraba “engavetada” puso sobre la mesa que “No es uno, son por lo menos diez casos de vehículos supuestamente blindados por los cuales se paga un arriendo de entre 11 y 15 millones de pesos, pero que al retirar los tapizados de puertas, techos y pisos no tenían la protección. Solo tenían un blindaje de nivel bajo los vidrios laterales. Una reprochable y peligrosa trampa”, aseguró Rodríguez a SEMANA.
Este medio tiene en su poder fotografías de los peritajes que expertos le realizaron a varias camionetas de alta gama arrendadas a la UNP. En todas se observa claramente la trampa.
“Una de las cosas lamentables que se detecta es que habían dejado acumular todas las investigaciones sobre este tipo de incumplimientos. Se iniciaban los procesos, se dejaban ahí, no se resolvía nada”, asegura Rodríguez.
La trampa con los falsos blindajes llevó al director de la UNP a diseñar un estricto proceso para la revisión de los vehículos blindados y a generar un cambio en las reglas de juego de contratación para evitar otra de tantas irregularidades: la cartelización.
La llegada de nuevos contratistas de vehículos fue traumática y peligrosa. Una de las empresas salientes que tenía que hacer empalme amenazó con “apagar” los 25 vehículos arrendados, lo hizo con cuatro, entre los que se encontraban los de dos expresidentes. Se abrió un proceso sancionatorio, pero va a paso de tortuga.
Si es compra sería bajo la modalidad de gobierno a gobierno o en sociedad con el Ministerio de Defensa, bajo la lupa de Colombia Compra Eficiente”, reveló Augusto Rodríguez.
Atentado por carro varado
Otra “perla” está relacionada con el deficiente mantenimiento que algunas empresas le realizan a los vehículos arrendados. Muchos carros alquilados a la entidad se varan frecuentemente y no son reemplazados a tiempo, en un evidente incumplimiento del contrato, que cuyo costo se podría contar en vidas.
Y para la muestra un botón. A mediados de abril de este año, la UNP le asignó un esquema de protección a Gabriel Ángel Quintero, líder de restitución de tierras en Norte de Santander. Entre mayo y septiembre el vehículo tuvo cuatro mantenimientos.
El 5 de octubre el carro quedó varado. La UNP solicitó a la empresa arrendadora, Neosecurity, la reposición, nunca llegó, y Quintero tuvo que moverse en moto, acompañado, a lo lejos, por sus dos escoltas. El 31 de octubre, fue víctima de un atentado en el corregimiento Llanos de los Trigos, cerca de Ocaña, Norte de Santander.
“Lo estaban esperando y comenzaron a dispararle. Los escoltas y Quintero se arrojaron a una zanja y desde allí repelieron el ataque. Nuestros escoltas no han sido preparados para el combate sino para la defensa y la protección de la persona. Tenían que sacarlo de la zona de peligro, pero no había forma porque no había vehículo”, reveló el director de la UNP.