Coronavirus | Barranquilla establece nuevas reglas para los protocolos de bioseguridad

Después de varias semanas en medio de una dura crisis social y económica vivida durante la mitad del año pasado debido al alto número de contagios y muertes por covid-19, Barranquilla pasó a ser una de las ciudades que menos medidas restrictivas ha decretado y, por el contrario, cada vez van siendo más flexibles.

En ese orden de ideas, la Alcaldía de Barranquilla anunció en las últimas horas las nuevas disposiciones en los protocolos de bioseguridad contra la propagación del coronavirus que se deben aplicar en los diferentes establecimientos comerciales.

La principal modificación es que en adelante la desinfección de zapatos, el registro de ingreso a establecimientos comerciales, el uso de tapetes desinfectantes, la toma de temperatura de cada persona, la aspersión de químicos sobre los visitantes y la desinfección de llantas, entre otras, serán medidas voluntarias.

Para algunos barranquilleros las medidas tomadas pueden ser “precipitadas” porque la pandemia aún está muy fuerte. Teniendo en cuenta que hasta el momento Barranquilla acumula 74.712 casos confirmados de coronavirus, 807 de estos están activos. En la ciudad han fallecido 2.209 personas por causas relacionadas con el virus, para una tasa de letalidad de 2,95 %, una de las más altas del país.

Sin embargo, la administración distrital señaló que los nuevos parámetros son tomadas teniendo en cuenta la literatura internacional y la evidencia científica publicada por organismos como la Organización Mundial de la Salud y el Centro de Control de Enfermedades, sobre prácticas eficaces para frenar el contagio de la covid-19.

Ante los cuestionamientos de la ciudadanía, Ricardo Plata, secretario de Desarrollo Económico, indicó que muchas de estas medidas fueron ordenadas en un momento en que no existía mucha información sobre el virus.

“Ya está demostrado que el lavado de manos y el uso constante del tapabocas son las medidas más efectivas. Lo que no quiere decir que estemos eliminando las otras, sino que las dejamos para cumplimiento voluntario, porque se ha visto que no son efectivas y terminan generando un falso sentir de seguridad. Como es el caso de la toma de temperatura, porque se ha visto que casi el 40 % o 50 % de los contagios ocurren en personas asintomáticas”, dijo el funcionario en diálogo con los medios locales.

No obstante, la Alcaldía pidió a los establecimientos comerciales y a los habitantes de Barranquilla cumplir obligatoriamente las medidas principales, entre estas, evitar aglomeraciones y mantener un distanciamiento físico.

“Asimismo, es fundamental la higiene y etiqueta respiratoria, la disposición adecuada de los elementos de protección personal (guantes, tapabocas, gafas, etc.), y la implementación de estrategias de prevención que generen cultura ciudadana y contribuyan a la disminución del contagio del virus, tales como jornadas de sensibilización, señaléticas, habladores y mensajes de difusión”, explicó la administración a través de un informe de prensa.

Entre las nuevas medidas anunciadas en la capital del Atlántico está el plan piloto del nuevo horario para los billares debidamente autorizados, que desde ahora podrán estar abiertos hasta la 1:00 a. m., al igual que los restaurantes y bares con protocolos registrados y autorizados para operar.

Aquellas personas o establecimientos que incumplan las medidas de bioseguridad establecidas en la ciudad pueden ser sancionados con una multa equivalente a $936.320 y la suspensión temporal de la actividad por incumplir las normas o disposiciones de seguridad o sanidad para el desarrollo de la actividad económica. Y aquellos que sean reincidentes en el incumplimiento pueden dar lugar al cierre del local por un periodo de hasta tres meses.

Las variación de los protocolos llega en el momento en que en la ciudad ya fueron aplicadas 2.524 de las 2.556 vacunas contra la covid-19 recibidas para la primera fase del Plan Nacional de Vacunación, según informó la Alcaldía.

Las 32 vacunas que no pudieron ser aplicadas fue debido a que se tuvieron que restar 6 dosis de 1 vial que fue separado del lote recibido por el Ministerio de Salud debido a una no conformidad y otras otras 26 debido a una variación del rendimiento de las mismas, según explicó el secretario de Salud, Humberto Mendoza.