Coronavirus | “No se justifica seguir sacrificando el comercio”, dice presidente de la FCV en Santander

La disyuntiva entre la reapertura económica y continuar con las medidas que eviten que los contagios de covid-19 en Santander se sigan disparando se inclinó hacia el levantamiento de las restricciones y dejar por fuera el pico y cédula y el toque de queda.

En la decisión, sin duda, influyó ver las calles de Bucaramanga y el área metropolitana atiborradas de gente en las jornadas de movilización, lo que, según algunos líderes, fue un factor decisivo en el aumento de contagios en el departamento. Así lo señala Víctor Raúl Castillo Mantilla, presidente de la Fundación Cardiovascular de Colombia (FCV), organización a la que también pertenece el Hospital Internacional de Colombia (HIC).

“Cuando uno mira las curvas y cuando comenzaron las manifestaciones, hay una relación directa entre estas y el incremento de contagios. Así que veníamos advirtiendo desde hace mucho tiempo que esto iba a traer una problemática gravísima para la región. Llevamos más de un año hablándole a toda la comunidad para que se cuidara”, dice.

Para Castillo, la decisión de levantar restricciones y trabajar en la reapertura económica ya no es una cuestión que le haga mella a la situación que vive el departamento, porque según su interpretación, al romperse todas las medidas de contención de la transmisión del virus por el paro, donde hay unas manifestaciones masivas, ya se rompió toda la contención. Entonces, cree que ya no se justifica seguir sacrificando al comercio. “No hay razón para decir cerremos ahora”, señala Castillo.

El profesional de la salud, además, asegura: “Abrir la economía no agrega más gravedad al problema, porque ya se rompió la contingencia completamente; no creo que restringir el comercio en este momento disminuya el contagio”.

Desde el trabajo analítico que ha hecho la organización a partir de las cifras de contagios, el directivo de la FCV y el HIC detalla que el departamento tiene “el 52 % de positividad, más el 20 % de seroprevalencia de infecciones previas, más el 6 % de personas ya vacunadas, que tienen inmunidad; estamos hablando del 78 %”, por lo que cree que las cifras deben empezar a ceder en una semana, pero ya los pacientes se enfermaron. “Encerrar ahorita no va a contener que haya más pacientes, porque ya están, ya la gente está enferma, ya el virus está en la gente”, agrega.

Lo que sí es cierto es que Santander vive el peor momento de la pandemia. Desde hace tres semanas la ocupación en las unidades de cuidados intensivos no baja del 90 % en el área metropolitana y a eso se suma que las jornadas del paro nacional no han tenido pausa.

“Estamos viviendo la peor parte de la historia de la pandemia, donde el nivel de contagios, como hemos visto, es exageradamente alto. Llegamos ya a un piso de 3.000 personas infectadas diarias, seguramente mucho más, esas son las personas a las que se les hace la prueba PCR. Si hiciéramos más pruebas, aparecerían más pacientes infectados”, apunta Castillo.

“Lo que quiere decir es que el nivel de contagio ya es muy alto. Y eso va de la mano con que la positividad de las pruebas, en los últimos días, está cercana al 50 %. Lo que hemos visto en nuestros análisis es que el 52 % de las pruebas son positivas. De cada dos personas que anda por la calle, una está infectada”, dijo.

“El 85 % no tiene mayor sintomatología, el 15 % tiene sintomatología y el 5 % va a requerir hospitalización; en cuidados intensivos al menos estará el 2 %”, aseguró Castillo.

La situación puede asumirse más o menos de esta manera: si se tienen tres mil personas contagiadas, el 5 %, es decir, 150 personas son las que requieren hospitalización. Esa sería una cifra diaria y que da cuenta de la razón por la que los servicios hospitalarios están colapsados.

Ante el panorama que se vive en esta región del país, Castillo hizo un llamado a la solidaridad: ”Una revuelta social en medio de una pandemia no tiene explicación. Vamos a tener 20 mil personas fallecidas de más en la pandemia en relación con lo que se esperaba, y esto como consecuencia del paro”.