NACIÓN
Pimp my Carroza, la iniciativa que protege a héroes ambientales en cuarentena
Sin poder detener sus actividades ni tampoco tener la opción de aislarse, cerca de 3.000 familias recicladoras están pasando hambre y necesidades en medio de la crisis sanitaria por el coronavirus. Este proyecto busca apoyarlos con alimentos y elementos como tapabocas.
En tiempos de confinamiento, la vida ha dado giros drásticos e inesperados sin importar nacionalidades, culturas, edades, idiomas ni profesiones. Miles de millones de personas alrededor del mundo han sido gravemente afectadas por la pandemia de coronavirus, especialmente por no contar con ingresos económicos para sobrevivir a la cuarentena y alimentar a sus familias.
Una de las poblaciones más vulnerables son los recicladores, quienes recorren a diario las calles en busca del sustento diario en los desechos de los colombianos para su labor de recolección y aprovechamiento. Su oficio es uno de los pocos que tiene permiso de circulación durante la cuarentena.
No obstante, estos trabajadores se exponen al riesgo de contraer la covid-19 por la falta de elementos necesarios para su protección personal. Ellos no pueden detener sus actividades y tampoco tienen la opción de aislarse.
Es por esto que la iniciativa brasileña Pimp My Carroza, liderada por el artista Thiago Mundano, preparó un plan de acción para apoyar a los héroes ambientales con nuevas oportunidades durante la cuarentena. Se trata de un crowdfunding, desde la plataforma Vaki, entre Pimp Bogotá y la empresa social Ecoworks, para recolectar recursos económicos y así apoyar a cerca de 3.000 familias que hacen parte de la ARB (Asociación de Recicladores de Bogotá).
Gracias a esta iniciativa, se han entregado 1.000 kits de protección que incluyen tapabocas, guantes, desinfectantes y 900 mercados a recicladores mayores de 60 años, para que puedan mantener una higiene adecuada en estos tiempos de pandemia y se protejan al momento de realizar sus labores.
“La situación de los recicladores a raíz de la cuarentena es muy difícil, no sólo porque los precios del reciclaje vienen en declive desde hace meses y con la cuarentena sus ingresos han disminuido significativamente, sino porque miles de ellos son mayores de 70 años y no pueden trabajar, pero los gastos siguen y están pasando hambre”, aseguró Andrés Felipe Padilla, cofundador de Ecoworks y embajador de Pimp Bogotá.
De hecho, Pimp My Carroza explica, a través de una serie de pasos, cómo hacer un set de limpieza que se puede ubicar en postes o puntos visibles de la ciudad para que los recicladores, o quienes no puedan acceder a un baño, se laven las manos en las calles y se protejan de la covid-19.
En Cali, por su parte, la estrategia de Pimp My Carroza no solo se encarga de entregar los mercados y elementos de aseo a los líderes de las asociaciones de recicladores, sino que estos trabajadores pueden acercarse a cualquier tienda de barrio que esté inscrita en el programa ‘CONEC-TEATE‘ y redimir un bono de $ 25.000 pesos por alimentos de la canasta familiar, vitales durante el aislamiento.
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Durante la primera etapa se han entregado un total de 110 mercados y 1.000 tapabocas.
"Son más de 3.000 familias de recicladores de oficio que vive en Cali y nuestra intención es poder llegar a beneficiar a la mayor cantidad, no solo con mercados y tapabocas, sino también con soluciones de almacenamiento y venta de material”, señaló Melissa Angel, embajadora de Pimp Cali.