Investigan presunta corrupción en contratos de compra de tintas para imprimir billetes en Colombia

El caso de la multinacional SICPA S.A. sacudió en días recientes la tranquilidad del día a día de los suizos. Sus directivos fueron condenados y multados por el pago de millonarios sobornos a funcionarios públicos para obtener directamente contratos entre los años 2008 y 2015. La empresa familiar, que pasó de vender productos agrícolas a ser líder mundial en las producción de tintas, tendrá que pagar 90,6 millones de dólares.

El caso, aunque parece lejano, toca directamente a Colombia puesto que en la decisión emitida, el pasado 27 de abril, por la Oficina del Fiscal General de Suiza (OAG, por sus siglas en inglés) señala que los directivos avalaron el soborno a funcionarios “en la realización de negocios en Brasil, Colombia y Venezuela”.

Sin embargo, en ningún momento se mencionan los nombres o cargos de los funcionarios que habrían recibido estos sobornos por parte de la empresa, que desde 1963 tiene el contrato de las tintas para la impresión de los billetes que emite el Banco de la República.

SEMANA tuvo acceso a toda la documentación que envió el Banco de la República a la Fiscalía General y la recolección inicial de pruebas que adelanta el ente investigador para establecer e identificar a todas las personas que tuvieron vínculos y contratos directos con los directivos de la multinacional suiza.

Desde el año 2020, por solicitud del Banco, una fiscal especializada contra la corrupción ordenó una búsqueda selectiva de datos para ubicar “todos los documentos y expedientes relativos a las actividades comerciales y de asesoría de la empresa Biobanknorte S.A. (antes Cruz Díaz e Hijos CIA Ltda.) “En relación con SICPA, el Banco de la República y/o Imprenta del Banco de la República, en el periodo desde 2005 hasta el 12 de agosto de 2020″.

Las pesquisas están dirigidas a identificar a todos los socios de esa empresa, así como información sobre sus transferencias en efectivo, transacciones cambiarias y notariales, compra y venta de oro, giros nacionales; compra, venta de vehículos y reportes de operaciones sospechosas. Para esto último se le envió un oficio a la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF), entidad adscrita al Ministerio de Hacienda.

En el tercer punto del documento se le pidió a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) información sobre las declaraciones de impuestos, renta, IVA, ICA, retención en la fuente, declaración de importaciones y exportaciones correspondientes al período de 2005 a 2020 frente a todos los socios.

Sin embargo, dos años después de esto, en febrero de 2022 para ser más exactos, la Fiscalía General advirtió que había sido imposible acceder a las instalaciones de la empresa ―pese a a la orden judicial con la que contaban―, puesto que, “en el domicilio radicado el guarda de seguridad del edificio les informó que Biobanknote S.A.S no funcionaba allí”.

La búsqueda selectiva de datos tuvo mejores resultados. La información permitió inferir que desde 2005 la empresa Biobanknote ha firmado varios contratos de con la multinacional suiza. Por lo menos 16 contratos fueron firmados en 15 años para todo tipo de trabajos.

Entre estos, la “compra, importación, almacenaje, promoción, distribución y venta de productos SICPA en el territorio. Asistencia técnica a los clientes. Promoción de nuevos productos. Asistencia a clientes para compras directas. Soporte local para participación de licitaciones y apoyo en las visitas. Identificar nuevos socios potenciales de negocios. Seguimiento de: ofertas, órdenes de compra, despachos y pagos de los clientes”.

En los contratos también aparece la promoción de dispositivos de seguridad para que se “Integren en los nuevos billetes de Colombia” y controles de calidad. En los próximos días se espera que se realicen nuevas diligencias dirigidas a la recolección de información.