Tras la pista de las tajadas que exigía la ‘madrina' en convenios del Ejército a nivel nacional

Las investigaciones de la Fiscalía en contra de una red de corrupción en la Cuarta Brigada del Ejército comenzaron a tener un efecto dominó. Tras las graves denuncias de la Revista Semana, fueron capturados nueve integrantes de la organización por el desvío de dineros y millones de pesos perdidos en contratos firmados de forma irregular. Días después cayó quien fuera el excomandante de la brigada con sede en Antioquia, el general Jorge Romero, para la época en que se registraron esos actos de corrupción.

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El excomandante Romero, quien fue designado en enero en la jefatura del Comando de Apoyo Integral y Desarrollo, unidad que maneja un abultado presupuesto para proyectos en el país, responde por cuatro delitos. La semana entrante un magistrado del Tribunal Superior de Bogotá definirá si lo envía o no a prisión, luego de que la Fiscalía lo señalara de intentar atraversársele a las investigaciones.

Durante la diligencia de solicitud de medida de aseguramiento, la Fiscalía destapó varias de sus cartas en contra de Romero. Pero lo que es aún más delicado, reveló material probatorio que evidenciaría que la red de corrupción se extendió mucho más allá de Antioquia y habría alcanzado contratos en todo el país. Ahora van tras la pista de nuevos nombres de contratistas y militares activos y retirados que salen mencionados una y otra vez en negocios por los que cobrarían coimas del 10 por ciento en convenios conseguidos a través de la Central Administrativa y Contable (Cenac) del Ejército.

Interceptaciones de la Fiscalía dejan en evidencia cómo a pesar de tratarse de un sistema que tiene altos estándares para el control para la contratación, oficiales adscritos al Cenac estarían presionando a los ganadores para el cobro de coimas.

Hasta ahora, la Fiscalía ha revelado irregularidades en la firma de 26 contratos entre el 2016 y 2017 relacionados a la Cuarta Brigada. Pero los anuncios hechos por el ente investigador apuntan a que miembros que salieron retirados del Ejército -en líos por muchas de estas irregularidades- hicieron "holding" con contratistas corruptos ya no solo en Antioquia sino en todo el país.

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La fiscal tercera delegada ante la Corte, Claudia Vanegas, reveló que la red delincuencial se extendió y sigue vigente. De esto dan cuenta las interceptaciones telefónicas reveladas en la audiencia contra Romero, las cuales dejan al descubierto cómo una oficial a la que llaman La Madrina o La Tía, al parecer estaba a cargo del cobro de un 10 por ciento de coima desde la Cenac. Pero la cadena no pararía allí.

En una primera grabación se escucha a una contratista identificada como Nelcy. "Me llamaron a decir que la coronel Martha Guío no quiere que gane, cómo la ves (...) Alguien me llamó y me dijo, pilas porque la coronel cuadró con otra empresa, no con usted".

De la conversación se entiende que hacen referencia a un proceso que apenas se va a publicar. La contratista se queja porque la coronel le estaría pidiendo una comisión del 10 por ciento, no obstante, no entiende cómo la va a pagar si es la misma oficial la que quiere sacarla del juego.

En otra de las grabaciones, Nelcy habla con indignación de cómo las reglas y controles del sistema de contratación realmente logran blindar de hechos de corrupción. No obstante, aunque la adjudicación puede llegar a beneficiar a un contratista determinado, teme porque la coronel o sus allegados se le puedan atravesar mediante diferentes maniobras. En esta llamada habla con Villota, al parecer el ayudante de Romero en la Cuarta Brigada.

"No hay cómo hacer trampa, ellos cómo pueden ayudar, a mi la vieja esa maricona en qué me ayudó el año pasado, me puse a darle quejas de Quintero y ella me decía que no se podía hacer nada, yo la guerrié solita. Es una bobada, se están llendo muy alto al decirle a la gente que el 10 por ciento cuando no hacen nada. Algo que no es necesario Villota porque trampa no se puede hacer".

La contratista presentía que en medio de tantos enredos en la contratación había funcionarios corruptos que en algún momento meterían en problemas a quienes accedieran al pago del porcentaje que exigían. "No nos podemos meter en problemas que usted sabe que él sigue ascendiendo", aseguran en la llamada al referirse a un oficial que estaría detrás de la Madrina en el control de la contratación.

"A nosotros no nos convienen echárnolos de enemigos porque si a ellos se les da la gana de mamarnos gallo con los pagos lo pueden hacer", dice.

Una última llamada en poder de las autoridades se refiere a la presión que sintió la contratista Nelcy una vez se ganó un contrato. "Dije que quedaba a disposición de ellos, que ellos no me habían ayudado en nada que lo único que habían hecho era joderme. Que si querían darselo a otro no iba a oponerme", manifiesta la mujer. Después asegura: "Esa vieja es muy descarada, está bien que me hubiera ayudadao en lago pero en qué. Vinieron a aparecer el día del cierre de la licitación".

Los nombres relacionados a estas grabaciones están siendo investigados por la Fiscalía. Se habla de varios oficiales que tendrían conocimiento de estos supuestos manejos irregulares desde el Cenac, una central administrativa que canaliza millonarios convenios y que maneja un presupuesto superior a los 400.000 millones de pesos.