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Eduardo Enrique Pulgar Daza, actual senador por el Partido de la U. | Foto: Archivo Particular

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Corte llama a declarar a juez al que habría intentado sobornar Eduardo Pulgar

La decisión la tomó el magistrado ponente Marco Rueda, de la Sala de Instrucción.

29 de octubre de 2020

SEMANA conoció que la Corte Suprema, puntualmente el despacho del magistrado Marco Rueda, de la Sala de Instrucción, citó a declarar al juez de Usiacurí, Atlántico, al que habría intentado sobornar el senador Eduardo Pulgar del Partido de La U.

El juez Andrés Rodríguez está citado para el próximo viernes 30 de octubre ante la Sala de Instrucción. Aunque se espera, según explican fuentes del proceso, que la comparecencia se haga de manera virtual, precisamente esta semana el senador Eduardo Pulgar acudió a la Corte Suprema de Justicia en compañía de su abogado Jaime Granados.

Ahora, tras la indagatoria, lo que debe ocurrir es que el magistrado Marco Rueda deberá elaborar una ponencia proyectando resolver su situación jurídica (la de Pulgar) como señala la ley.

Esa discusión, posteriormente, se deberá dar con acompañamiento de los demás compañeros de Sala. En la discusión participan magistrados como: Héctor Alarcón, quien preside la sala de instrucción; César Reyes, el magistrado que ordenó medida de detención domiciliaria al expresidente Uribe, y Francisco Farfán, Cristina Lombana, entre otros. Cabe recordar que al juez al que se le habría ofrecido el soborno no había sido posible localizarlo. Sin embargo, todo apunta a que está dispuesto a declarar esta semana por este caso tan sonado a nivel nacional.

De otro lado, SEMANA había informado en días pasados del viaje que hizo el magistrado auxiliar del despacho del magistrado Rueda a Barranquilla, por espacio de más de una semana, para una nueva etapa de la práctica de pruebas. Allí una de las pruebas recogidas, clave para el proceso, fue la declaración de Luis Fernando Acosta Osío, quien fuera en su momento cónsul honorario de Polonia en Colombia y quien sería la persona que iba a favorecerse con el ya conocido intento de soborno que el congresista Eduardo Pulgar le habría hecho a un juez del municipio de Usiacurí, Atlántico. Acosta fue miembro del consejo directivo de la Universidad Metropolitana de Barranquilla.

De igual manera, la Procuraduría emitió un comunicado en el que dejó claro que se opone a que la investigación pase a manos de la Comisión de Ética del Congreso. Señaló el Ministerio Público hace varias semanas que: “Para casos de corrupción, la única competente para investigar y sancionar a congresistas es la Procuraduría General de la Nación, como lo establecen los tratados internacionales de lucha contra la corrupción, y recientes fallos del Consejo de Estado, como el que rechazó la demanda de nulidad y restablecimiento del derecho del exalcalde de Bogotá, Samuel Moreno Rojas, contra la decisión que lo destituyó e inhabilitó 18 años por los hechos de corrupción relacionados con la cesión del contrato de obra para la adecuación de la calle 26 al Sistema de Transporte TransMilenio”.

Sobre esta investigación, hay voces que han señalado que existe falta de competencia del Ministerio Público para disciplinar a funcionarios de elección popular mientras eso se resuelve en el Consejo de Estado, pues en materia disciplinaria no puede avanzar por ahora la investigación al senador Eduardo Pulgar. Un caso que puede que le corresponda al actual procurador Fernando Carrillo o a la recién elegida Margarita Cabello, exministra de Justicia.

Cabe también recordar que el pasado 14 de agosto la Procuraduría citó a audiencia de juzgamiento disciplinario a Pulgar Daza y le reprochó que hubiera incumplido sus deberes con la defensa de la legalidad y la promoción del bienestar general, con lo que habría atentado contra la dignidad y majestad de la justicia y su recta administración, al realizar el supuesto ofrecimiento económico para que el juez Promiscuo Municipal de Usiacurí favoreciera con una decisión a Luis Fernando Acosta Osío, miembro del Consejo Directivo de la Universidad Metropolitana de Barranquilla.