Judicial
Crimen de Jaime Garzón | JEP rechaza definitivamente al exsubdirector del DAS, José Miguel Narváez
Esto por no entregar información nueva sobre los procesos que se adelantan en su contra, entre estos el asesinato de Manuel Cepeda y el secuestro de Piedad Córdoba.
Por no aportar a la verdad, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) rechazó definitivamente el sometimiento del exsubdirector del DAS, José Miguel Narváez, condenado a 26 años de prisión por su participación en el crimen del periodista y humorista Jaime Garzón Forero. En la decisión emitida por la Sección de Apelación de la JEP se determinó que pese al ultimátum Narváez nunca entregó información relevante o novedosa.
Recalca la JEP que solo en un caso extremo Narváez habló directamente del crimen de Cepeda, asegurando que era inocente y que se le debía extender el fallo que absolvió de toda responsabilidad al comandante paramilitar Carlos Casta Gil. “Hizo caso omiso de las observaciones, el procedimiento dialógico y el avance del trámite transicional, y solo reiteró las generalidades que componían su primera intervención”.
En la decisión, la Sala cuestionó el hecho que muchas de las víctimas tenían la convicción que Narváez iba a revelar datos nuevos y reconocer su participación en los hechos en los que la impunidad ha sido una constante y no se tiene certeza de quién ordenó los crímenes ni los motivos que los llevaron a esto. Después de tres años de su sometimiento, el exsubdirector del DAS tuvo un “superfluo compromiso” en todos sus procesos.
En otro de los apartes de la decisión se concluyó que “la solicitud de sometimiento de Narváez Martínez a la JEP creó en las víctimas unas expectativas de acceder a la verdad plena sobre las personas que ordenaron el asesinato, la forma en cómo fue planeado, etcétera, que el solicitante frustró con sus intervenciones posteriores. Las víctimas no obtuvieron lo que prometió el interesado”.
En febrero de 2021, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia dejó en firme la condena de 25 años de prisión contra Narváez por su responsabilidad en el crimen de Jaime Garzón, registrado el 13 de agosto de 1999. En la decisión se corroboró que instigó a Carlos Castaño para que ordenara el crimen del humorista político por considerarlo una persona cercana al ELN y de lucrarse con su labor humanitaria para la liberación de secuestrados.
La cercanía de Narváez con varios comandantes paramilitares fue confirmada en el juicio. Fue citado varias veces a los campamentos de las AUC a dar clases de estrategia militar.
Narváez también fue sentenciado por su participación en el escándalo de las chuzadas del DAS, ordenando interceptar y recolectar información de defensores de derechos humanos, dirigentes políticos de izquierda y periodistas.