ANÁLISIS
Lo que está en juego con la renovación de la flota de TransMilenio
En los próximos días se publicarán los pliegos de la licitación de 1,6 billones de pesos para renovar 1.383 buses que trasitarán por la ciudad. Estos son algunos ajustes que algunos consideran se deberían hacer a la lista de requisitos que se han hecho hasta ahora.
La renovación de la flota de las fases I y II de TransMilenio es una necesidad para Bogotá que se tenía que haber suplido en 2012. Es justo por el envejecimiento de los buses que se han empezado a presentar fallas que han incomodado a los usuarios. Muchos vehículos se varan, se quedan sin luz, tienen averiados sus techos o sus puertas y emiten gases contaminantes.
La tan esperada licitación tiene los ojos encima de varias personas porque estos nuevos vehículos serán los encargados de transportar a miles de habitantes de la capital por los próximos 12 años. Pero además significa una inversión importante. En la licitación de la compra de los vehículos se adjudicarán 1,6 billones de pesos y en la operación y el mantenimiento, 5.5 billones, para un total de 7,1 billones de pesos. Es bastante dinero si se tiene en cuenta, por ejemplo, que la primera línea del metro costaría 12 billones.
Los prepliegos de la licitación de la compra de vehículos salió el 7 de marzo y desde los posibles proponentes hasta los concejales hicieron cientos de observaciones. La idea de publicar estos documentos era justamente poder corregir algunos puntos de modo de modo que la compra traiga los mejores beneficios para la ciudad. Estos son los principales lunares.
Infografía: ¿Cómo renovarán la flota de TransMilenio?
Ambiente
Incentivos insuficientes
Uno de las grandes críticas es que en los prepliegos no es una obligación que los nuevos vehículos sean a gas o eléctricos. Se exigió como mínimo que tengan tecnología diesel Euro V (que es o que ya tiene la ciudad). Si bien desde TransMilenio se ha dicho que si los oferentes incluyen en sus propuestas buses Euro VI (un diesel de mejor calidad), eléctricos o a gas recibirán una mayor puntuación, hay quienes piensan que no hay mayor incentivo.
La concejal de la Alianza Verde María Fernanda Rojas dijo a SEMANA que de un total de 1.000 puntos posibles a obtener el proponente que haga una oferta con tecnología Euro VI o superior tendrá un máximo de 50 puntos. “Este valor resulta muy bajo. Todos los demás puntos a evaluar tienen mayores puntajes. La experiencia en operación de buses de alta capacidad puede dar hasta 150 puntos, el apoyo a la industria nacional 100 puntos, y la oferta económica 700 puntos”, agregó.
Ahora bien, en los prepliegos se establece que el 67 por ciento de los buses serán biarticulados y del 33 articulados. De este porcentaje, cerca del 20 podría ser eléctrico o gas. Pero como está expuesta en este momento la licitación, quienes deseen operar estos buses deberán desarrollar un parque automotor y demás infraestructura para su funcionamiento. Esto haría que la oferta fuera más costosa para los empresarios que le quieran apostar a los buses eléctricos y por lo tanto el negocio les sería menos rentable. Es por esto que Rojas sugiere que ese gasto lo asuma el Distrito.
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Según TransMIlenio, en la oferta en el mercado existente, las opciones de buses eléctricos son limitadas. Y por otro lado, TransMilenio “no puede establecer requisitos en la licitación que deriven en el favorecimiento a un único proveedor. Al respecto cabe recordar que los estudios de mercado demuestran que los buses biarticulados a gas Euro VI piso alto son fabricados por una sola empresa. Así mismo, los buses articulados electricos a baterias piso alto tiene también un único proveedor”. También se ha dicho que en la ciudad ha ya tiene un bus eléctrico recorriendo las calles de la ciudad y ha presentado muchos inconvenientes.
Pero estas razones no resultan satisfactorias pues históricamente sólo existió un solo proveedor de buses biarticulados en el país, que era Volvo. Hugo Sáenz, representante del colectivo Respira Bogotá, dijo a este portal que si bien en el país solo hay una empresa de buses eléctricos, la china BYD, en el mundo hay alrededor de 25 empresas como la alemana Vossloh que ya hace masivamente buses articulados y biarticulados eléctricos.
Sáenz agregó que TransMilenio no puede excusarse en que estas tecnologías no están listas, en que solo hay una empresa o en que el bus eléctrico ha presentado fallas. Según él, la ciudad debe avanzar con el mundo hacia las tecnologías limpias: “Esta licitación es la oportunidad de innovar porque si no lo hacemos ahora en las siguientes fases de TransMilenio van a decir lo mismo. Por supuesto que como con cualquier tecnología habrá fallas pero no nos podemos quedar en lo mismo siempre”.
Y en cuanto a los buses a gas natural, esta es una tecnología aprobada por el Banco Mundial, que funciona de forma masiva en todo el planeta. Pero para no ir tan lejos, en Medellín operan actualmente 408 buses con esta tecnología. Según cifras de Promigas, esos vehículos permitieron un ahorro en combustibles de 44.112 millones de pesos entre 2011 y 2017 (a marzo). Y en comparación con vehículos diesel, la ciudad ha dejado de emitir 100 toneladas de partículas contaminantes desde el inicio del sistema. En Cartagena la operación del sistema Transcaribe a gas natural vehicular fue contratada en noviembre de 2015 por un periodo de 15 años. Actualmente ya ruedan 192 vehículos dedicados a gas natural en las calles de Cartagena con un ahorro anual estimado de 1,2 millones de dólares.
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Salud
El querer buses eléctricos o a gas natural no es un capricho. Entre mejores tecnologías habría menos enfermedades, y si hay menos enfermedades habría mayor productividad laboral y en expectativa de vida, que se supone debe primar. El concejal del Centro Democrático Diego Molano destacó que en Bogotá el Sistema de salud gastó más de 4 billones de pesos atendiendo pacientes con enfermedades respiratorias, y que en el 2015, según Planeación Nacional, hubo 10.527 muertes relacionados con la polución del aire urbano. Además, un estudio de la Universidad de los Andes reveló que medios de transporte como los buses o el sistema de Transmilenio, representan un 60 por ciento del total de contaminación del aire en Bogotá.
Otras observaciones
Entre otras preocupaciones está que se necesitan para adecuar 47 estaciones para el funcionamiento de los biarticulados. 25 no están ni siquiera en licitación y por tanto es posible que no estén listas cuando los vehículos empiecen a andar por la ciudad. Por mencionar un ejemplo, la estación de Toberín se tardó cerca de 4 años en su ampliación, aunque el IDU había que solo se tardarían 11 meses. De modo que si por un lado se recogerá un mayor número de pasajeros, por el otro habrá un poco atasco en la vía porque estos buses ocuparán más espacio y mientras estos recogen los articulados quedarán en la fila de espera.
La licitación no tiene especificadas las cámaras de seguridad que se habían prometido para mejorar la seguridad del sistema, Aunque desde TransMilenio se ha dicho que sí harán parte de la licitación. Tampoco se establecen exigencias en cuanto hardware avanzado. Ni se menciona mayor cosa acerca la posibilidad de tener portabicicletas para promover su uso.
Tampoco la posibilidad de exigir un tope de remuneración mensual por vehículo que asegure una baja en la tarifa. Las Fases I y II de transmilenio son las más rentables del sistema. El porcentaje de ganancia de los operadores que hoy e del 18 por ciento, según Maria Fernanda Rojas se podría reducir para, por ejemplo, reducir el déficit fiscal del sistema que pasa los 590.000 millones de pesos.
La razón para no incluir todo lo que se ha dicho hasta ahora obedece principalmente al factor económico. Pero si se tiene en cuenta el costo beneficio a largo plazo se puede concluir que los buses buses con tecnologías limpias ahorrarían dinero, daño al medio ambiente y la salud.
No se dice que de esta licitación dependa la vida de los bogotanos, pero sí podría ser ese paso que los lleve a tener una mejor calidad de vida. Estas decisiones marcan un camino a la visión de ciudad.
Está disponible: Un bus para conservar el aire