Nación
¿Cuál fue el primer crimen de Luis Alfredo Garavito?
Así fue como inició la vida criminal de este sujeto que por años aterrorizó al país.
Hoy, Colombia enfrenta la noticia de la muerte de uno de los asesinos en serie más infames en la historia del país: Luis Alfredo Garavito. Este sujeto que había aterrorizado a Colombia durante la década de los 90, finalmente ha llegado al final de su vida. Su legado de terror se extiende por décadas, y es importante recordar cómo comenzó su reinado de atrocidades.
El primer crimen atribuido a Luis Alfredo Garavito ocurrió en octubre de 1992, en el municipio colombiano de Jamundí, en el departamento del Valle del Cauca. Este primer asesinato marcó el comienzo de una carrera criminal que aterrorizaría al país durante años.
El modus operandi de Garavito era particularmente espeluznante. Se dirigía a plazas de pueblos y parques donde abordaba a sus jóvenes víctimas, en su mayoría niños de edades comprendidas entre los 8 y los 12 años. Usando engaños y manipulación, lograba llevar a los niños a lugares apartados donde comenzaba su terrible ritual.
En lugar de cometer sus crímenes de manera instantánea, los prolongaba. Mientras abusaba sexualmente de sus víctimas, las torturaba y acuchillaba lentamente hasta que perdían la vida. El nivel de crueldad y frenesí era tal que no mostraba signos de detenerse.
El asesino, en sus propias palabras, confesó que lo hacía para sentirse bien, lo que le brindaba placer no solo sexual, sino también espiritual. Para Garavito, matar niños se convirtió en su manera de estar en el mundo.
A la edad de 12 años, Garavito se convirtió en víctima de abuso sexual. Durante dos años, el dueño de una droguería en su vecindario lo torturó y violó de manera sistemática. Estos horrores dejaron cicatrices profundas en su psicología y lo atormentaron durante toda su vida.
Sin embargo, la oscuridad en la vida de Garavito se remonta a sus primeros años. Cuando tenía 15 años, acorraló a un niño para tocarlo, lo que llevó a su expulsión de la casa de su familia por sus comportamientos homosexuales. Sus primeros años de abuso sexual y trauma establecieron las bases de su futuro aterrador.
Garavito ha relatado que no dijo nada sobre estos abusos por temor a que su familia creyera al agresor en lugar de a él. Su vida estaba marcada por el dolor y la violencia desde temprana edad.
El oscuro camino de Luis Alfredo Garavito lo llevó a convertirse en un asesino en serie despiadado. Su vida previa a los crímenes incluyó la venta de estampitas religiosas en todo el país, y aunque su comportamiento era poco sociable, intentaba calmar sus demonios internos con grandes cantidades de alcohol.
Desde 1992 en adelante, Garavito perpetró cientos de asesinatos, en su mayoría de niños, ejecutados por un impulso que lo llevaba a matar de manera repentina y sin planificación. Se le atribuyen alrededor de 140 asesinatos de niños en Colombia, aunque se sospecha que el número real podría ser cercano a 200.
Para llevar a cabo sus crímenes, Garavito viajó por diferentes regiones de Colombia, visitando unos 59 pueblos en total. Se cree que creó fundaciones falsas y dio charlas con el propósito de estar cerca de los niños, mientras buscaba trabajos temporales que le proporcionaban los recursos necesarios para continuar con sus asesinatos.
La noticia de la muerte de Luis Alfredo Garavito ha generado diversas reacciones en Colombia. Algunos sienten que finalmente ha llegado la justicia, mientras que otros lamentan que no haya cumplido una condena más larga. Independientemente de las opiniones, el nombre de Luis Alfredo Garavito quedará marcado en la historia de Colombia como uno de los asesinos en serie más infames.