Nación

¿Cuántos servidores públicos hay en Colombia?

El grueso de los servidores se encuentra en la rama Ejecutiva del poder público, que en el nivel nacional recoge a 913.040 servidores.

9 de marzo de 2022
El director de Función Pública, Nerio José Alvis, aseguró que el empleo público en Colombia es uno de los más diminutos en cifras en la región.
El director de Función Pública, Nerio José Alvis, aseguró que el empleo público en Colombia es uno de los más diminutos en cifras en la región. | Foto: Función Pública

Es muy común leer o escuchar que Colombia cuenta con demasiados servidores públicos y que existe un exceso de burocracia en todo el país, y para dar claridad sobre el verdadero tamaño del Estado en Colombia, el director del Departamento Administrativo de la Función Pública, Nerio José Alvis, reveló cuántos servidores públicos hay en todo el país.

Según datos de Función Pública, Colombia cuenta con poco más de 1,3 millones de servidores públicos en todo su territorio. El grueso de los servidores se encuentra en la rama Ejecutiva del poder público, que en el nivel nacional recoge a 913.040 servidores; seguido por el orden territorial, con 261.675; la rama judicial, con 59.981; los entes autónomos, con 53.588; los organismos de control tienen 23.978; la organización electoral cuenta con 3.726; el sistema integral de verdad, justicia, reparación y no repetición, 1.871, y la rama Legislativa completa 870 servidores.

“Probablemente al conocer estas cifras la percepción sea que el Estado colombiano está inundado de servidores”, pero la realidad sería otra, explicó Alvis.

El director de Función Pública detalló que, del total de funcionarios a nivel nacional de la rama Ejecutiva, 333.287 son docentes y 410.459 miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional; esto indica que de la totalidad de servidores del orden nacional, el 81,45 % está conformado por docentes y uniformados.

“Por tanto, en el orden nacional, solo nos queda 18,54 %, es decir, 170.000 servidores sobre quienes recae la responsabilidad de ejecutar, bajo las directrices del presidente de la República, todas las actividades administrativas que están al servicio de los intereses generales de la comunidad para el cumplimiento de los fines esenciales del Estado”, complementó José Nerio Alvis.

El director precisó que, desde una perspectiva internacional, en 2020 la Ocde publicó el informe Panorama de las administraciones públicas en América Latina y el Caribe, en el cual compara el empleo del sector público como porcentaje del empleo total, con corte al año 2018. Y en dicho informe Colombia ocupó el último lugar en Latinoamérica en burocracia, siendo el país con la menor relación de servidores (3,7 %), seguido por Honduras (6 %) y Guatemala (6,4 %), y Trinidad y Tobago es el campeón (25,9 %).

Adicionalmente, el más reciente informe de ese mismo organismo internacional, denominado Government at a Glance 2021, hace ese análisis con sus países miembros, pero esta vez con corte al año 2019. A pesar de que Colombia no está en este comparativo, desde Función Pública —añade el director Alvis— “nos pusimos en la tarea de usar los cálculos descritos en su metodología para establecer el porcentaje, arrojando 5,44 %. Cifra que nos ubicaría también en el último lugar, seguidos por Japón con 5,89 % y Corea del Sur con 8,13 %, y siendo el campeón de la burocracia en este estudio Noruega, con 30,69 %”.

El director puntualizó que “incluso si a los 1,3 millones de servidores le sumáramos los contratistas del orden nacional y territorial, que también son menos de los que se especula, seguimos quedando en el último lugar, ubicándonos solo por encima de Japón”.

Así las cosas, partiendo de estas cifras, el director de Función Pública subrayó: “Nuestro empleo público es uno de los más diminutos en cifras, pero aún así demostramos eficiencia en la pandemia, donde el Estado no solo no se paró, sino que alcanzamos notables avances en materia de vacunación, reactivación económica, protección de los más vulnerables y mayor presencia del Estado en los territorios, entre otros”.

El director concluyó: “Mi invitación es a que nos saquemos del imaginario la tesis mentirosa de que somos un mega Estado”.