Cuarentena por UPZ en Bogotá: el impacto en el comercio ante los nuevos cierres

Desde el pasado 30 de enero hasta las 11:59 p. m. del 12 de febrero, nueve UPZ (Unidades de Planeamiento Zonal) están en cuarentena con el fin de reducir la propagación del coronavirus, que a la fecha ha infectado más de 614.000 personas en Bogotá.

Por tal razón, el presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), Nicolás Uribe, dijo que en las UPZ viven cerca de 1,7 millones de personas y operan más de 53.000 empresas.

Asimismo, señaló: “Para lograr buen comportamiento ciudadano con respecto a la pandemia, es más rentable trabajar sobre la prevención que sobre el miedo”.

De hecho, reiteró que Bogotá y la región cerraron el año 2020 con un total de 449.455 empresas activas, es decir 11 % menos frente a 2019. Esto equivale a 54.838 empresas menos.

“En Bogotá hay casi 450.000 empresas, de las cuales el 90 % son pymes y no aguantan más de dos semanas al estar cerradas”, dijo Sandra Neira, miembro de la Junta Directiva de la CCB.

Impacto económico de las cuarentenas en Bogotá según la CCB

· En el primer ciclo de cuarentena que terminó el 17 de enero, Usaquén reflejó una disminución del 11 % en la cantidad de empresas, al pasar de 45.834 en 2019 a 40.956 en 2020, es decir que ahora tiene 4.878 empresas.

· Suba tiene una disminución de 6.486 empresas, pasando de 56.603 a 50.117, es decir una reducción del 11 % en relación con 2019, mientras que Engativá tiene 5.098 empresas menos con una disminución del 12 %, pasando de 41.417 en 2019 a 36.319 en 2020.

· Teusaquillo, que terminó cuarentena el 18 de enero, tiene una disminución de 2.576 empresas, es decir del 15 %. Pasó de 17.348 empresas en 2019 a 14.772 en 2020.

· En cuanto a Kennedy y Fontibón, que terminaron cuarentena el 21 de enero, la primera pasó de 43.600 empresas en 2019 a 38.587 en 2020, registrando una disminución de 5.013 empresas (-11 %), mientras que Fontibón pasó de 22.240 en 2019 a 19.942 en 2020, con 2.298 menos, reflejando una caída del 10 %.

· En cuanto a las localidades que entraron en el segundo ciclo de cuarentena, hasta el 28 de enero, Bosa pasó de 18.230 empresas en 2019 a 15.782 en 2020, con una disminución de 2.448 (-13 %); Ciudad Bolívar presentó una reducción del 15 % al pasar de 13.163 en 2019 a 11.176, es decir 1.987 menos; Puente Aranda pasó de 21.342 en 2019 a 19.188 en 2020, registrando una reducción de 2.154 (-10 %); Rafael Uribe pasó de 12.095 en 2019 a 10.459, con una reducción de 1.636 (-14 %), y Usme pasó de 6.790 en 2019 a 6.319, con una disminución de 471 (-7 %).

Por tal razón, antes de iniciar la cuarentena en las UPZ varias personas salieron a protestar en Suba argumentando que necesitan trabajar y que están “cansadas del encierro”.

Asimismo, Fedesarrollo advirtió que, con las nuevas medidas implementadas en Bogotá y otras ciudades, las compañías ven muy difícil un repunte para empezar el 2021, lo que amenaza con más cierres de empresas, especialmente micro.

Además, que las nuevas medidas de aislamiento que han implementado ciudades como Bogotá y Medellín le costarán a Colombia entre $ 8,3 billones y $ 12,5 billones.

Por otro lado, de acuerdo con cálculos de Scotiabank Colpatria, las medidas de aislamiento en Bogotá restringirán el 65 % de la actividad económica de la capital, lo cual va a afectar directamente el comportamiento de la economía nacional, pues la ciudad representa el 26 % del PIB del país.

Las UPZ son:

Localidad de Suba: Tibabuyes, Suba y El Rincón.

Localidad de Engativá: Boyacá Real y Garcés Navas.

Localidad de Fontibón: Fontibón.

Localidad de Kennedy: Castilla y Timiza.

Localidad de Usaquén: Los Cedros.

Hay que señalar que las personas que violen la cuarentena tendrán una sanción de $ 932.000.

Finalmente, el Distrito les recomendó a los ciudadanos migrar a la utilización de tapabocas quirúrgicos o N95 si el riesgo de contagio es mayor, para superar el pico de la pandemia del coronavirus. Además, las autoridades les han pedido a los habitantes de Bogotá que intensifiquen las medidas de cuidado como evitar reuniones familiares o sociales para evitar una mayor propagación del virus.