“De ninguna manera es posible calificar lo ocurrido como una estafa”: fundadora de Feria Buró rompió el silencio en SEMANA y habló sobre futuro del evento

La Feria Buró se convirtió en uno de los eventos más comentados de la capital colombiana, debido al fuerte auge que tomó en los amantes de la cultura, el arte y la moda nacional. Muchos emprendimientos quisieron darse a conocer en esta plataforma, brindando opciones para las compras de fechas especiales como Navidad.

Sin embargo, el evento se ha visto rodeado, en los últimos años, de una serie de polémicas, las cuales denunciaban malos tratos, “estafas” e incumplimiento de condiciones para algunas ediciones. De hecho, la versión 2023 de fin de año terminó en el foco de atención de miles de personas, quienes no estuvieron de acuerdo con las fallas que se registraron en varios videos, en los que se veían inconsistencias y malos espacios para el desarrollo del evento.

Tras lo plasmado en redes sociales, la fundadora de la Feria Buró decidió romper el silencio y hablar con SEMANA sobre lo que está pasando, enfatizando en que todo lo organizado por este proyecto estaba regido por contratos y acuerdos. La encargada de la idea expresó cómo se estaba manejando el tema, brindando un panorama de sus soluciones o acciones al respecto.

Fundadora de Buró habló de polémica

María Alejandra Silva, que ha estado detrás de la feria, concedió una entrevista a SEMANA, en la que se refirió a diversos puntos de esta controversia. La empresaria enfatizó en el trabajo del evento con los emprendedores y dio un vistazo a qué pasará con Buró a futuro.

SEMANA: ¿Cuál es su perspectiva de lo que ocurrió en la reciente edición de la Feria Buró?

María Silva (M. S.): Es muy triste para nosotros la reacción generalizada del país frente a la denuncia de algunos emprendedores que no alcanzaron sus metas en esta versión de Buró. La organización, en sus diez años de trayectoria, siempre ha cumplido lo establecido en el contrato y ha trabajado con mucho esmero en beneficio de los expositores. Es muy doloroso recibir esta reacción en masa de personas que no conocen los hechos detrás de la noticia.

Buró, en sus 25 ediciones realizadas desde 2013, ha trabajado con amor y pasión, sirviendo de escenario para que muchísimos emprendimientos se den a conocer, se posicionen en el mercado y se constituyan como empresas. Esta es una labor exigente, donde siempre hay oportunidad para nuevos aprendizajes y donde más del 90 % de los expositores han alcanzado sus metas.

SEMANA: De acuerdo con lo que se pudo observar en redes sociales, hay expositores que indican que fueron víctimas de estafa, ¿cómo se ha manejado el tema?

M. S.: De ninguna manera es posible calificar lo ocurrido como una estafa. Buró celebró contratos con los expositores enmarcados en cláusulas concretas en que se estipulan los deberes y derechos de los expositores y de los organizadores. Las mismas cláusulas que se han utilizado a lo largo de los diez años y 25 ediciones de la feria y que han servido de base para la proyección y el posicionamiento de cientos y miles de emprendimientos en el país.

En Buró tenemos claro que el éxito de los emprendedores es nuestro éxito y los resultados, sean buenos o malos, también repercuten en nuestra organización. De allí que nos esforzamos en diseñar y ofrecer unas condiciones que resulten idóneas para todos. En este caso, Buró gestionó y puso a disposición de los expositores un recinto ferial ya probado con éxito en otras versiones de la Feria.

La decoración, como es ya tradición, fue de alto impacto, lo mismo que el cubrimiento en medios y otros canales de difusión. Dicho eso, no podemos pasar por alto la insatisfacción de esta veintena de expositores que reportaron fallos en el funcionamiento de algunos puntos, los cuales fueron revisados y atendidos con la administración del Centro Comercial en la medida que los expositores fueron expresando sus inconformidades.

Al día de hoy seguimos escuchando a los expositores uno a uno, siempre buscando un diálogo cordial enmarcado en la mutua comprensión.

SEMANA: Viendo el resultado de esta edición de Buro, ¿cuál considera que fueron los errores o fallas que se cometieron?

M. S.: La organización trabaja con base en una metodología y una puesta en escena que siempre tiene oportunidades de mejora. Con cada feria, exposición y stand se vive una experiencia diferente que deja aprendizajes tanto para los emprendedores como para los organizadores.

Estos aprendizajes están asociados a múltiples factores internos y externos. La dinámica de los mercados, la situación de la economía, las tendencias y hasta el ánimo colectivo pueden jugar a favor o en contra en una exposición.

SEMANA: ¿Qué soluciones se les han brindado a quienes expusieron su inconformidad con las bajas ventas?

M. S.: Las soluciones, como siempre, tienen varios frentes. Está el frente legal que consiste en la revisión de la situación a la luz del contrato firmado entre el expositor y la organización. Existen casos en los que, más allá de lo legal, implementamos sesiones de pedagogía en materia de marketing y relacionamiento, adaptación a las tendencias, entre otros. Esto lo hemos hecho en el pasado de la mano de expertos, con resultados muy positivos.

En este contexto, vale la pena destacar que la Feria Buró funciona como una plataforma de visibilidad y proyección de nuevos emprendimientos, donde se abren espacios para darlos a conocer en nuevos mercados y puedan socializar con clientes, emprendedores, concretar potenciales alianzas y hacer red. El fin último es concretar ventas. Tal y como funcionan los centros comerciales, es función de los organizadores plantear unas condiciones favorables para el flujo de personas y ventas, pero no es posible garantizar un aforo determinado o un volumen de ventas específico. Este es un aspecto muy importante que desde el diálogo cordial hemos querido que todos los involucrados comprendan.

SEMANA: Como fundadora de la feria, ¿considera que se incumplió lo pactado con los expositores?

M. S.: En ningún momento se incumplió lo pactado, Buró cumplió con proporcionar un recinto ferial y resolver cualquier imprevisto, también con la decoración, cubrimiento y relacionamiento en medios, etc., cada una de las estipulaciones del contrato fueron cubiertas, lo que corrobora que Buró jamás incumplió en sus obligaciones.

Buró siempre ha pactado con los expositores desde la buena fe, mediante un contrato claro y el éxito obtenido en los diez años y 25 ediciones de la feria da fe de ello. En este escenario se han posicionado muchos emprendimientos en cada una de las ediciones en Bogotá, Medellín, Cali y Cartagena, donde se han alcanzado óptimos resultados.

SEMANA: ¿Qué futuro viene para Buró después de las polémicas que surgieron en los últimos años?

M. S.: Continuaremos trabajando en beneficio del emprendimiento en Colombia, brindando espacios que generen visibilidad y posicionamiento para cientos de empresarios que ven en la Feria una plataforma para darse a conocer, entablar relaciones y constituir alianzas con el plus de obtener ventas en línea del objetivo principal de posicionamiento.

Los resultados generales de las 25 versiones han sido óptimos, ha habido más aspectos positivos y ganancias que aspectos negativos en toda la historia de la Feria, situación que nos impulsa a seguir trabajando de la mano de los empresarios que creen en Buró y que, por fortuna, son mayoría.