Bogotá
Descubren fábrica en Bogotá donde Los Bad Boys producían uniformes para disidencias; se los pagaban con droga que después vendían
En un inmueble ubicado en el barrio Venecia, autoridades encontraron el centro de confecciones totalmente equipado con más de 25 máquinas de producción.
En un impresionante operativo, las autoridades lograron desarticular una elaborada red delictiva que operaba en las sombras de Bogotá, dedicada a la producción ilegal de uniformes y prendas destinadas a abastecer a las disidencias de las Farc. La investigación, liderada por la Fiscalía General de la Nación, en coordinación con la Sijín de la Policía Metropolitana, reveló la existencia de un centro de confecciones clandestino donde se llevaban a cabo estas actividades ilícitas.
La red, conocida con el nombre de ‘Los Bad Boys’, habría utilizado un método de pago sorprendente y peligroso: presuntamente recibían drogas como contraprestación por los textiles empleados en la elaboración de los uniformes. Los narcóticos luego eran distribuidos en distintos puntos de venta clandestinos en Bogotá.
La investigación arrojó resultados impactantes cuando las autoridades llevaron a cabo una diligencia en el sur de la ciudad, logrando la captura de dos presuntos cabecillas de esta organización criminal. Ricardo Ramírez Gómez y Rocío Ramírez Díaz fueron detenidos en un inmueble ubicado en el barrio Venecia, donde se encontró un centro de confecciones totalmente equipado con más de 25 máquinas de producción.
El allanamiento del lugar también permitió el decomiso de un importante cargamento de más de 250 prendas y accesorios de uso exclusivo de la fuerza pública, además de 5 rollos de tela verde pixelada y otros elementos vinculados a la fabricación ilegal de uniformes.
Una fiscal especializada en organizaciones criminales tomó cartas en el asunto y procedió a imputar a los detenidos el delito de utilización ilegal de uniformes e insignias. Sin embargo, los sospechosos se han mantenido en silencio y deberán enfrentar medidas de aseguramiento mientras avanza el proceso judicial en su contra.
Según las pruebas recolectadas durante la investigación, Ricardo y Rocío Ramírez serían señalados como los posibles propietarios de este centro de confecciones clandestino, utilizado para la elaboración de textiles y otros elementos destinados a las disidencias de las Farc.
Este importante golpe a las actividades ilegales de las disidencias representa un paso significativo en la lucha contra la delincuencia y el narcotráfico que tienen azotada a la capital del país.
Pancartas alusivas a las disidencias en Bogotá
El pasado miércoles 5 de julio, se presentó un hecho bastante inusual al sur de Bogotá que de inmediato activó las alarmas en el Distrito y en las autoridades: en dos importantes sectores aparecieron colgadas dos pancartas que hacen alusión a las disidencias de las Farc, lo que enseguida generó preocupación entre la comunidad.
Se trató de pancartas firmadas por el frente 53 Edison Romana, de la Segunda Marquetalia, al mando de alias Iván Márquez. Una de las pancartas fue colgada en un puente peatonal en el barrio Lucero y la segunda fue vista en el puente de Las Américas, cerca al sector de Banderas.
La Alcaldía de Bogotá confirmó que ambas pancartas ya fueron quitadas por parte de las autoridades y de momento se encuentran haciendo las investigaciones pertinentes para lograr establecer quién o quiénes colgaron estas vallas.
La Décimo Tercera Brigada del Ejército Nacional y la Policía Metropolitana de Bogotá, también se pronunciaron al respecto: “Se desplegó un componente de investigación criminal e inteligencia, con el propósito de esclarecer su veracidad y lograr la ubicación de los responsables de estos hechos”, informaron.
Así mismo, dieron a conocer que se implementaron medidas inmediatas para identificar e individualizar a las personas comprometidas en estas acciones, a través de la recolección de elementos materiales probatorios y evidencia física.
Señalaron además que, de acuerdo al Centro Integrado de Información e Inteligencia Contra el Terrorismo, conformado por autoridades administrativas y fuerza pública, no se cuentan con elementos de información que evidencien la presencia de este “Gaor” en la ciudad de Bogotá y Sumapaz.
No obstante, es de mencionar que, desde hace algunos meses, Bogotá está en alerta por los planes de las disidencias de Iván Mordisco y la Segunda Marquetalia, de las Farc, de avanzar hacia el corredor del Sumapaz. La divulgación de un panfleto virtual en el que se anunció la refundación del frente 53 de las Farc encendió las alarmas.
“Informamos a la comunidad del páramo de Sumapaz y de Cundinamarca en general; del Meta y el Alto Vichada que después de un largo trasegar por estas pintorescas cordilleras… hemos culminado con éxito la refundación del frente 53 Edinson Romaña de las Farc EP Segunda Marquetalia”, advirtieron las disidencias.
Luego de la amenaza, el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, y la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, negaron la presencia de estos grupos criminales en la región. “Solo se trata de una estrategia digital, no hay presencia física de este grupo en el departamento”, aseguró García, mientras que López fue más tajante: “El frente 53 ni existe ni existió en Sumapaz”.
A pesar de eso, los mandatarios realizaron un consejo de seguridad con el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, quien advirtió que la situación es más preocupante de lo que se cree. “Ya es una realidad que hay presencia de estos grupos en el Meta. La Segunda Marquetalia se está disputando la tierra con la disidencia de Mordisco. Las extorsiones se están quintuplicando, están carnetizando a la gente, y con esa modalidad se quieren expandir a Bogotá y a Cundinamarca”.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo ha señalado, con alertas tempranas, que la verdadera intención de las disidencias de las Farc no es quedarse en el Meta, sino apoderarse del corredor natural del Sumapaz para llegar hasta la zona rural de Bogotá.